El presidente de la Generalidad catalana, Carles Puigdemont, ha declarado este jueves en el debate de política general del parlamento regional: "Seguramente no les guste escuchar esto, que la media de Cataluña en conocimiento de la lengua castellana está por encima de la media española, porque les desmonta el discurso, pero ¿qué quieren que les diga?". Nada más acabar la frase, la presidenta de la cámara, Carme Forcadell, tuvo que intervenir para acallar los rumores que provenían de las bancadas de Ciudadanos y el Partido Popular.
Continuó Puigdemont, cada vez más desenvuelto: "Los hechos son los hechos. La realidad es la realidad. Y la propaganda es otra cosa. Y aquí no hemos venido a hacer propaganda...". El grupo de Junts pel Sí interrumpió el momento de inspiración con sus aplausos y Puigdemont acabó así la parrafada: "Hemos venido a hablar de política del país".
Antes, el dirigente nacionalista glosó de manera grandilocuente las ventajas "de nuestro modelo de proyecto lingüístico plurilingüe", su valor como "garantía de cohesión social" y el hecho de que "asegura a todo el alumnado dominio de las dos lenguas oficiales", tras lo que añadió: "No entendemos ciertos ataques a un modelo que da buenos resultados, y más cuando Cataluña se sitúa por encima de la media del Estado español en conocimiento de lengua castellana".
Las cátedras de fiestas populares
El colofón de esa parte del discurso de Puigdemont fue el siguiente gran anuncio: "Creemos que la investigación, los intercambios y la catalogación son elementos de salvaguarda de la cultura popular. Por eso hemos creado por primera vez, y con la colaboración de las diputaciones, dos cátedras universitarias, una en la Rovira i Virgili sobre el mundo casteller y otra en Lérida sobre el fuego –en alusión a unas fiestas populares del Pirineo leridano–. Y que van ligadas a dos fiestas muy nuestras reconocidas por la Unesco".
Se esperaban respuestas contundentes por parte de Inés Arrimadas, presidenta del grupo de Ciudadanos, y de Xavier García Albiol, del PP, pero no hubo tales. El falseamiento sistemático de las pruebas de evaluación, los procedimientos de la inmersión lingüística, el extrañamiento del español en las aulas, la prohibición de hablarlo en los patios, las quejas de los padres, el hostigamiento nacionalista a quienes piden escolarización bilingüe para sus hijos, las denuncias en la Unión Europea... nada de todo eso figuró en los discursos y réplicas de los representantes de los partidos.
'Elogio' de Arrimadas a Mas
En su discurso inicial, Inés Arrimadas aseguró: "Con usted de presidente, señor Puigdemont, hay más embajadas y más barracones. (...) Hablan ustedes de un modelo de éxito pero resulta que en Cataluña incide más la situación socioeconómica de las familias en el resultado de los alumnos que en la media del resto de España. ¿Y eso es un modelo que garantiza la igualdad? No. Estamos por encima de la media española en cuanto a la vinculación de la situación socieconómica de las familias y el resultado de los alumnos. Y eso es una realidad".
Ya en la réplica y tras un reproche de Puigdemont por renunciar a discutir sobre el particular del "método plurilingüe", Arrimadas aseguró: "Después, respecto a la lengua. No, no, no renunciamos –no renunciamos–, lo que pasa es que en un debate de política general tenemos mucho más programa nosotros que esto. Yo solo le digo que me encantaría, de verdad, que en el futuro los niños catalanes tuvieran las mismas competencias lingüísticas que el president Mas. Porque yo cuando le veía hacer una rueda de prensa con esa soltura en catalán, en castellano, en inglés y en francés, yo pensaba: 'Eso es lo que me gustaría a mí para los niños catalanes en la escuela pública'. Pues ese sistema trilingüe que ha tenido el señor Mas, y que tan buenísimos resultados le ha dado, es lo que a mí me gustaría implantar en las escuelas públicas catalanas. Sé que usted no está de acuerdo, pero yo creo sinceramente que estudiar en tres lenguas es mejor que estudiar solamente en una".
El PP, por lo trilingüe
Xavier García Albiol, antes de la réplica de Arrimadas y en su primer turno alegó: "Ante su modelo de escuela, defendemos la libertad de las escuelas y las familias para elegir su educación. Hemos puesto en muchas ocasiones el futuro de la escuela en las manos de radicales que quieren acabar con la libertad de la escuela concertada. El Partido Popular es el único que no duda a la hora de defender la libertad de los padres de escoger la escuela de sus hijos, pero queremos una escuela también pública de calidad, que todos los alumnos puedan tener las mismas oportunidades que los hijos de los consejeros. El modelo lingüístico trilingüe que los líderes independentistas, o la mayoría de los líderes independentistas, quieren para sus hijos debería ser posible también para los hijos de todos los catalanes".
En la réplica se ha referido a la escasa inversión en enseñanza en Cataluña en alusión al informe de la Fundación Jaume Bofill que sostiene el nivel de gasto en tal materia en la región catalana está al nivel de Laos y Guatemala.
La "inmersión lingüística" ha desaparecido del lenguaje político. Los niños catalanes no tienen garantizado un correcto uso del español, reducido a dos horas semanales en la mayoría de los colegios públicos, restringido por apestado en no pocos centros concertados y respetado tan sólo en los privados. Y cientos de escuelas en Cataluña lucen a su entrada un cartel con la leyenda: "Per un país de tots, l'escola en català". Y a pesar incluso del lema que ven cada mañana al llegar al cole, los niños de la escuela catalana hablan un español superior.
Todos los entrecomillados de Puigdemont, Arrimadas y Albiol se han extraído de la transcripción provisional realizada por los servicios del parlamento regional de Cataluña.