Fuentes de CDC consultadas por este diario no desmienten que el encuentro entre el candidato y líder del PP Mariano Rajoy y un representante de Convergencia podría haberse producido ya. Se trataría de una cita secreta a petición de la propia formación independentista catalana.
En el partido de Artur Mas prefieren guardar silencio a las puertas de un fin de semana intenso con el congreso refundacional del partido y al que podría afectar la imagen de un acercamiento, o al menos, de una respuesta a la invitación del presidente en funciones. Convergencia prefiere evitar que las negociaciones para la formación de un nuevo gobierno en Madrid se cuelen en su intento de renovación del partido y en la brecha abierta entre los sectores afines al ex presidente Mas, cuya relación con Rajoy es prácticamente nula y los del actual presidente Carles Puigdemont con actitud más receptiva con Moncloa.
Todo después de que la vicepresidenta en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, jugara al despiste en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Preguntada por si ya se había celebrado este encuentro o al menos ya se había establecido contacto telefónico, la número dos del Ejecutivo no quiso concretar demasiado, dejando abiertas todas las interpretaciones.
Las reuniones con el presidente del Gobierno son "a gusto del consumidor: Unos dicen que aquí, otros en el Congreso. Unos hablan. Otros no". "Nosotros no podemos imponer el formato", subrayó para a continuación señalar que como su intención es hablar con todos y generar un buen clima, son los "visitantes" del señor Rajoy los que deciden si hacen público o no su encuentro con el presidente. Desde Convergencia aseguran a LD que " suscriben todas las palabras de la vicepresidenta" y eso significa que no desmienten que uno de esos " visitantes" a los que se refería Sáenz de Santamaría podría ser algún miembro del partido.
Sea como sea, atendiendo al calendario y a los tiempos que maneja Mariano Rajoy, parece difícil que no haya recibido ya a Convergencia cuando esta formación tiene menor representación parlamentaria que otras. Según estableció el propio presidente con su primera llamada a Coalición Canaria, esos contactos comenzaron a hacerse de menor a mayor representación.
Primero recibió a los representantes canarios, que solo tienen un diputado en el Congreso. Después fue el turno del PNV, con cinco parlamentarios. Tras los nacionalistas vascos deberían haber acudido a La Moncloa los representantes de Convergencia, con ocho diputados, pero en su lugar fueron los dirigentes de Esquerra Republicana, que cuentan con nueve parlamentarios.
El martes, Mariano Rajoy se reunirá en el Congreso primero con el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, y después con el líder de Podemos, Pablo Iglesias. Estos dos encuentros son los únicos confirmados a la espera de que se concrete la cita del presidente del Gobierno con el secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez. En ningún caso, parece, habrá reunión con CDC entremedias.