Una foto como la del niño sirio Aylan Kurdi, ahogado en la costa turca cuando él y su familia intentaban llegar a la isla griega de Kos despierta un vivo debate sobre los límites de su uso: algunos defienden que estas imágenes no deben usarse por su dureza y por respeto al niño y a su familia; otros creen que son necesarias para concienciar a la opinión pública de la magnitud de tragedias como la que está ocurriendo en Siria.
Sin embargo, nadie puede defender que se usen como munición en la batalla política y para atacar a los rivales de otros partidos, que es exactamente lo que hizo este jueves la líder de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez.
Rodríguez respondía a un tuit en el que la presidenta de la Comunidad de Madrid mostraba su consternación por la imagen del niño sirio, y aseguraba que "su partido y el otro –en referencia a PP y PSOE- son los que inician las guerras más crueles y colocan los muros más altos".
Como no podría ser de otra forma, el tuit ha tenido gran cantidad de respuestas críticas de otros usuarios de Twitter, que le reprochan no sólo su oportunismo sino también su falta de conocimientos de geopolítica internacional.