El Gobierno reconoce que Ignacio González pudo sufrir una investigación "ilegal" por parte de la Policía Nacional. Después de toda una semana de calvario político, toda vez el lunes se declarara víctima de un chantaje policial tras la publicación de varias informaciones que le situaban en la diana, el ministro del Interior se ciñó a lo conocido judicialmente -en otras palabras, evitó mojarse en todo momento- para dar la razón en buena parte al presidente de la Comunidad de Madrid.
Aún con "cautela y prudencia", habida cuenta de que el caso del ya famoso ático está judicializado, Jorge Fernández Díaz se refirió a los posibles "chantajes y extorsiones" para destacar que el titular del juzgado en cuestión -en un auto del 27 de marzo de 2013- se dirigió al director general de la Policía para solicitarle información sobre "la investigación ilegal de la que fue objetivo" González por parte los agentes implicados en la trama.
La Dirección General cumplió con el requerimiento -el magistrado pidió que esa resolución también se pusiera en conocimiento del Ministerio Fiscal y las partes- y envió copia original del expediente abierto al entonces comisario de Marbella Agapito Hermes de Dios, según el relato del ministro al término del Consejo de Ministros.
Además, en relación a la reunión de González con los comisarios Enrique García Castaño y José Manuel Villarejo, Fernández Díaz recordó que se produjo en noviembre de 2011 y que él juró su cargo como titular de Interior el 22 de diciembre. Esto es, a su juicio, quién ha de dar explicaciones es el anterior Ejecutivo, el de José Luis Rodríguez Zapatero, aunque en dichos momentos ejerciera ya "en funciones". Soraya Sáenz de Santamaría, a su lado, no hizo comentarios.