No se esperaba gran cosa de la comisión del caso Pujol en el parlamento catalán y las peticiones de comparecencias de los partidos confirman el naufragio de la escenificación que se pretende llevar a cabo a partir de este martes y bajo la presidencia del diputado antisistema David Fernández (CUP). En pleno idilio político entre el presidente de la Generalidad, Artur Mas, y el antedicho "parlamentario", la comisión se presentaba como un trampolín político para las CUP en menoscabo de ERC, una tribuna para el lucimiento dialéctico de Fernández.
El torpedeo de la comisión ha comenzado antes de tiempo y procede incluso de quienes más interesados podrían parecer en que se esclareciera uno de los mayores casos de corrupción política de la historia de la democracia española. No es previsible que eso pase. Para CiU, la comisión es un ventilador por el que deben pasar el extesorero del PP, Luis Bárcenas, o los expresidentes Felipe González y José María Aznar. En esa línea, pero con la inclusión de banqueros, empresarios, comisionistas y exmiembros del sector negocios de CiU y del PSC, así como de Alicia Sánchez Camacho, se manejan el resto de los partidos del bloque separatista.
La petición más sorprendente, sin embargo, procede de Ciudadanos y el PP, que han coincidido en reclamar la presencia en la cámara autonómica de Jordi Planasdemunt, efímero consejero de la Generalidad entre 1982 y 1983 y protagonista del "caso Planasdemunt", consistente en la emisión de pagarés falsos. Planasdemunt también fue síndico de la Bolsa de Barcelona y director del Institut Català de Finances (ICF) de la Generalidad. La singular coincidencia ha sido detectada por el digital e-noticies.
El problema con Planadesmunt es que falleció en 1998, circunstancia que recoge incluso la "wikipedia", tanto en su versión en español como en la de idioma catalán. Fuentes de uno y otro partido admiten la posibilidad de que el contrario haya tenido acceso a su listado de comparecientes antes de su registro en la ventanilla de la comisión, lo que explicaría la coincidencia en el error.