El presidente de la Generalidad, Artur Mas, adelantará las elecciones autonómicas en respuesta a la previsible suspensión de la consulta por parte del Tribunal Constitucional (TC). En medios nacionalistas se da por seguro que Mas no optará por la desobediencia que preconiza el resto de sus socios en el frente separatista y que una vez cegada la vía de una consulta legal el próximo 9-N, ERC y CiU escenificarán la ruptura del bloque. Sólo faltan cincuenta días para esa fecha, un plazo en el que difícilmente puede la Generalidad improvisar un referéndum con "garantías democráticas", tal como ha matizado Mas en sus últimas intervenciones
En teoría, todo estaría preparado para llevar a cabo el referéndum, han asegurado el propio Mas y la vicepresidenta de su gobierno, Joana Ortega, responsable del dispositivo técnico. Sin embargo, la Generalidad no dispone de información censal actualizada, menos de quinientos de los novecientos municipios catalanes se han comprometido a ceder sus datos y colaborar con la consulta y carece de cualquier apoyo internacional que valide sus pretensiones.
Mas intenta mostrarse convincente, pero ni en ERC ni en las CUP existe la más mínima duda: no se atreverá a desobedecer. Su compromiso, de hecho, termina con la convocatoria del referéndum. A partir del rechazo del TC está previsto que se reúnan los principales dirigentes del bloque separatista, en el que además de CiU, ERC y las CUP figuran también los ecosocialistas de Iniciativa per Catalunya (IC). Ni ellos ni los tres diputados de las radicales CUP son determinantes por lo que la "unidad" de acción depende de Mas y Junqueras.
Informe del CATN
Sobre sus relaciones, uno de los medios de referencia del separatismo, el diario Nació Digital, subraya una respuesta del dirigente de CiU a Junqueras durante el debate de política general: "Por cierto, un pequeño paréntesis: sólo es..., yo recomiendo que nos releamos ahora -y es importante hacerlo, me parece- lo que escribió el Consell Assessor per a la Transició Nacional (CATN) en julio de 2013. Es un informe muy bien hecho sobre como comienza y acaba un proceso de estas características".
De este informe del CATN se deduce que el "plan B" son las elecciones plebiscitarias. Se trata del primero de los que escribió el citado consejo, presidido por Carles Viver Pi-Sunyer, que fue vocal del TC, y del que forman parte los articulistas Pilar Rahola y Salvador Cardús, entre otros. Es en su página 135 donde más favorable se muestra a la "solución" de las plebiscitarias: "En efecto, si se constata de manera incontrovertible la imposibilidad de realizar el referéndum o la consulta sobre la independencia de Cataluña por las vías legales anteriormente expuestas, como consecuencia del reiterado posicionamiento contrario de las instituciones del Estado, la vía alternativa de las elecciones plebiscitarias se revela como la más adecuada para poder conocer la posición de los ciudadanos y ciudadanas de Cataluña sobre su futuro político colectivo. A tal efecto se pueden invocar argumentos de legalidad, de eficacia y de respeto al principio democrático".
"Inconvenientes" de la desobediencia
A esa conclusión llega tras analizar otros escenarios: "El Informe sobre la consulta, elaborado por el Instituto de Estudios Autonómicos en marzo de 2013, señala que una negativa del Estado a convocar una consulta, a autorizarla o a permitir que se realice, abriría a la Generalidad la posibilidad de emplear, legítimamente desde una perspectiva política, vías alternativas de convocatoria de consultas, a través de consultas no oficiales o elecciones plebiscitarias, que podrían ser implementadas mediante declaraciones unilaterales del Parlamento de Cataluña. Desde la Generalidad y con el respaldo de la mayoría de los ayuntamientos de Catalunña se podría organizar una consulta al margen de las disposiciones legales del Estado y de las de la Generalidad (si estas últimas han sido suspendidas por el Tribunal Constitucional a instancias del Gobierno central). Se trataría de aplicar la legalidad catalana a pesar de su suspensión. Una posible alternativa consistiría en que la organización de la consulta correspondiera exclusivamente a entidades de la sociedad civil, si bien contando con el respaldo indirecto de la Generalidad y de los ayuntamientos. Los inconvenientes de estos escenarios son claros: confrontación frontal con el Estado si se emplea la primera de las vías mencionadas, fácil campaña de desprestigio desde los actores e instituciones contrarios a la consulta por su ―inutilidad (presentada como ilegal y anticonstitucional), previsible escasa o insuficiente participación, deslegitimación de los resultados –también en la esfera internacional–, problemas logísticos de organización, etc. Los inconvenientes mencionados desaconsejan este escenario alernativo".
Perfiles electorales étnicos
Además de constatar los "inconvenientes" de aplicar la "legalidad catalana", el texto del CATN contiene consideraciones que abundan en los perfiles étnicos del "proceso catalán". Así, y tras analizar una serie de encuestas, afirma: "Según los resultados, el tipo de individuo menos favorable a la realización de una consulta es una mujer de la demarcación de Barcelona de más de 60 años, con estudios primarios o sin estudios, de un municipio entre 10.000 y un millón de habitantes, nacida fuera de Cataluña y con los padres también nacidos fuera de Cataluña".
En cambio y en la misma página, la 30, el retrato del independentista es el de un joven culto, universitario incluso: "El perfil de individuo más favorable a la realización de una consulta es un hombre de la demarcación de Gerona, de menos de 30 años, con estudios universitarios, de un municipio de menos de 10.000 habitantes, nacido en Cataluña y con los dos padres también nacidos en Cataluña".
Y se insiste en la cuestión en la siguiente página: "Según el modelo estadístico realizado, el factor que más explica la diferencia entre los que apoyan la realización de una consulta y los que no lo hacen es el lugar de nacimiento. Los ciudadanos que han nacido en Cataluña tienen una probabilidad de dar apoyo a una consulta superior en más de dos veces y media a la probabilidad de estar en contra. El segundo factor en importancia es el del origen de los padres, el cual multiplica la probabilidad de respaldar la consulta en más de una vez y media con respecto a rechazarla comparado con quien tiene el padre y la madre nacidos en Cataluña. El tercer factor es territorial, y tiene que ver con la dimensión del municipio: vivir en un municipio pequeño multiplica por 1,5 la probabilidad de respaldar la consulta". El uso recurrente del término "demarcación" se debe a que la Generalidad ha decidido que no reconoce la ordenación provincial.