Alberto Ruiz Gallardón sigue alimentando los rumores sobre su futuro político. "Es muy difícil saber dónde estaremos hoy, mañana o dentro de un año", afirmó en la sesión de control. El PSOE le reclamó, con un tono muy duro, que abandone su intención de reformar la ley del aborto. El ministro de Justicia defendió el proyecto, pero de sus palabras no se puede desprender -ni mucho menos- que se vaya finalmente a aprobar.
Lo que sí recordó el titular de Justicia es que la reforma estaba en el programa electoral del PP, contó con el respaldo del Consejo de Ministros y los órganos consultivos avalaron en su mayoría los cambios. Y todo ello con independencia de que lo haya apoyado por una "profunda convicción" de que hay que defender tanto a la mujer como al no nacido.
Así, Gallardón se revolvió contra la "pretendida superioridad moral de la izquierda" aunque dejó abierta la puerta a su marcha del Gobierno la próxima semana. "Ese tema es para nota", contestó a los periodistas tras salir rápidamente del Congreso. En el pleno, no contó con gesto alguno de cariño por parte de Mariano Rajoy. Sí estuvo despachando con Soraya Sáenz de Santamaría pero ésta evitó referirse al aborto aunque fue preguntada al respecto.