Un 44,1% de los catalanes votaría a favor de que Cataluña se convierta en un Estado independiente en la consulta separatista planteada por el Gobierno catalán, frente a un 36,2% que se pronunciaría en contra, según un sondeo que publica este sábado El Periódico de Cataluña.
La encuesta, sobre una muestra de 800 personas, fue realizada por el Gabinete de Estudios Sociales y Opinión Pública (GESOP) este mismo viernes, un día después de que CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP acordaran la pregunta de la eventual consulta, que plantearía "¿Quiere que Cataluña se convierta en un Estado?" y en caso afirmativo "¿Quiere que ese Estado sea independiente?".
Según el sondeo, a la primera de las preguntas planteadas votaría que sí el 52,3% de las personas que acudirían a votar y, de estos, el 84,3% respondería afirmativamente a la opción de que Cataluña sea un Estado independiente, frente a un 11,1% que lo haría en contra. Curiosamente, el porcentaje del 84,3% sobre el 52,3%, que apoyarían un estado independiente para Cataluña, es uno de los datos más destacados de portada, pese a que la realidad de la encuesta es que sólo un 44,1% estaría de acuerdo con convertir a Cataluña en un estado independiente.
Por el contrario, se decantaría por el "no" en la primera de las preguntas un 30,4% de electores, frente al 5,9% que votaría en blanco y un 1,6% que se inclinaría por el nulo. Además, el rechazo frontal a la cuestión, en la muestra de El Periódico, no deja de ser desdeñable ya que, de entrada, un 30,4% de los encuestados diría que no a la primera de las preguntas. A esto, abría que sumar un 5,9% de voto en blanco y un 1,6% que preferiría el voto nulo. En total, un 37,9% estaría rechazando directamente el objeto de la consulta.
Esto supone, según la estimación de GESOP, que, del total de electores que acudiría a votar a esa consulta, apoyarían un Estado independiente el 44,1%, mientras que los votos contrarios a la independencia sumarían un 36,2 por ciento, en un sondeo que revela un porcentaje de indecisos del 19,7%, lo que no deja de ser significativo. Y más cuando la propia encuesta reconoce que ha realizado el sondeo a partir de la intención directa de voto manifestada por los entrevistados y sin tener en cuenta el índice de abstencionistas, que, según la encuesta, sería de aproximadamente el 7%, porcentaje que ha sido excluido al calcularse el resultado final "ante la imposibilidad de estimar su comportamiento por falta de precedentes de ese tipo de consulta".