La sombra de Luis Bárcenas sigue persiguiendo al presidente. En esta ocasión fue en Berlín, donde participa en la cumbre por el empleo organizada por Angela Merkel, su homóloga alemana. Tras una larga introducción sobre los objetivos del Ejecutivo en la cita, muy en la línea de los ya alcanzados en el último Consejo Europeo, Mariano Rajoy respondió a las cuestiones de dos periodistas en una declaración en la embajada española.
Al jefe del Ejecutivo le preguntaron muy concretamente si cree que Magdalena Álvarez debe abandonar sus responsabilidades en el Banco Europeo de Inversión (BEI) por su imputación en la trama de los ERE y por qué evita nombrar en sus intervenciones a Bárcenas, extesorero del PP ahora en prisión. Pero el presidente bordeó ambas cuestiones insistiendo en su respeto "siempre a las decisiones judiciales".
"Creo que no es bueno que pretendamos condicionar, hablar o comentar sobre temas que tienen que llevar los tribunales y a los que todos debemos respeto", zanjó ante los periodistas. De nuevo, unos pocos segundos para dar carpetazo a los dos asuntos que más titulares llenan en estos momentos y que, sin duda, preocupan a la opinión pública.
En el Ejecutivo creen que se tienen que mantener al margen y dejar "que la Justicia actúe". También en el caso de los ERE, inciden, aunque desde el Partido Popular se ha vinculado formalmente la marcha de José Antonio Griñán con la trama corrupta.