El Partido Popular mantendrá su vínculo con la fundación FAES, su laboratorio de ideas, a pesar de las fricciones con José María Aznar. La confirmación llegó de voz de María Dolores de Cospedal y su visualización más inmediata se producirá durante el campus de verano de la institución, que reúne en Navacerrada a los máximos representantes del centro-derecha nacional e internacional. Una cita que volverá a contar con María Rajoy o, al menos, así consta en la agenda del presidente.
La fotografía entre Aznar y su delfín se reproducirá, un verano más, el próximo siete de julio. Primero tendrán una breve conversación y, a renglón seguido, Rajoy hará su radiografía de situación tras una presentación del anfitrión. Será en la clausura del campus, que previamente contará -si se cumple con lo previsto- con la presencia de varios miembros del Ejecutivo y de la cúpula nacional del PP. Por ejemplo, en la inauguración correrá a cargo de la secretaria general.
Antes de ese cara a cara, el PP afronta otra cita sin indisimulada tensión. El próximo lunes, Aznar protagoniza una conferencia en el club Siglo XXI, que preside Eduardo Zaplana. A las bravas, su discurso será potente. Fuentes próximas al expresidente asegurna que mantendrá su diagnóstico ni más ni menos que en el escenario donde, en 19988, se presentó como alternativa a Hernández-Mancha. Habrá aforo completo, pero Génova aún estudia cuál será su representación. Tampoco lo tiene claro el Gobierno. Además, FAES convoca su Patronato, del que Rajoy es integrante, antes de final de mes.
Cospedal: no existe debate interno
En paralelo, Cospedal quiso zanjar públicamente que exista discusión interna a raíz de la enmienda a la totalidad de Aznar a las políticas del Gobierno. Fue muy rotunda: "Sé que ha habido un debate en los medios de comunicación, pero debate interno francamente le tengo que decir que no lo hay. Con todos los respetos, nada", dijo en rueda de prensa. Para Cospedal todo está muy claro: Aznar es expresidente "y hace sus opiniones" y Mariano Rajoy "es el presidente del Gobierno" y cuenta con el mayor apoyo en votos "de la historia del centro-derecha".
Sin embargo, y pese a la pretendida estrategia de dar por cerrado el asunto, en el PP se sigue viviendo con intensidad todo lo ocurrido, y lo que pudiera estar por llegar. A Cospedal, que no tiene mala relación con Aznar pese a lo publicado -el expresidente participó activamente en su campaña electoral, por poner un ejemplo-, le preguntaron en dos ocasiones si es el momento de reconducir la relación con el partido: "No hay nada que reconducir", fueron sus palabras exactas. Más aún, Cospedal quiso reconocer que fue "un gran presidente" y "de eso no le cabe la menor duda a nadie". Y recalcó: "Es el presidente de honor del PP", y así lo seguirá siendo, se encargan de remachar en privado.
La falta de apoyo a Aznar
En FAES, una de las críticas más duras es a propósito de la falta de apoyo del PP. Pese a haber acumulado portadas de El País contestadas en los tribunales, Aznar no ha contado con el calor de su formación, es parte del argumento que repiten. A micrófono abierto, Cospedal se limitó a decir que "esa pretendida atribución de falta de defensa no sé quién la puede decir. Aunque, en ya en pasillos, fuentes populares reconocen que el nuevo puente tiene que venir a través Génova: "Las cosas, desde luego, están mucho peor en Moncloa", afirman, no sin recordar las respuestas dadas por la vicepresidenta en los últimos viernes.
A ojos de Cospedal, el partido está tranquilo y respaldando de forma cerrada a Rajoy. Y, en efecto, sólo algunas facciones en el Congreso han venido a respaldar con cierta fuerza el diagnóstico de Aznar. Otro grupo, éste sí bastante más numeroso, incide en tomarse sus palabras como un toque de atención porque conecta con buena parte de las bases. Prácticamente nadie cree que vaya dar el salto a la primera línea. En rueda de prensa, la número dos enfatizó lo que significa Aznar para la dirección: "Es el presidente de honor y ésta es su casa siempre y tiene la posibilidad de opinar" pero "el presidente del Gobierno es Rajoy".