Antes de las ocho de la mañana, de nuevo tras una noche frenética, el Partido Popular emitió un comunicado con cuatro puntos en el que contestaba al diario El País, que titula en su edición de este miércoles que "el PP pagó a Bárcenas una cantidad fija al mes hasta diciembre de 2012".
Lo primero que quiso dejar claro el PP es que la relación laboral con Bárcenas se rompió en 2009, cuando tuvo que renunciar a su acta de tesorero. De hecho, "en el año 2010 el Sr. Bárcenas Gutiérrez solicitó la reincorporación a su puesto de trabajo en las oficinas centrales del PP, por haber finalizado la excedencia forzosa que tenía concedida en razón de su escaño de Senador al cual había renunciado", informa. Anteriormente, ya se había producido su renuncia al puesto de responsable de las cuentas del PP.
Mariano Rajoy tomó entonces la decisión de "no reintegrar al Sr. Bárcenas a su puesto de trabajo reconociendo en consecuencia, a los efectos de lo previsto en el artículo 56 de Estatuto de los Trabajadores, una indemnización por la resolución del contrato de trabajo", expone a las claras el PP. Entonces, ya prácticamente nadie se fiaba del que fuera hombre de confianza durante tantos años.
Ambas partes acordaron, tras el portazo de Génova, que la indemnización procedente "se abonara en diferido mediante un pago mensual hasta diciembre de 2012, con el abono por parte de la empresa de las cotizaciones sociales durante el período de abono del citado finiquito".
Con la percepción de esta indemnización, remata el PP en su comunicado de urgencia, se consideró "saldado y finiquitado por toda clase de conceptos, el contrato de trabajo que unía a ambas partes, no realizando el Sr. Bárcenas ningún trabajo desde aquel momento" para la formación.