El primero en intervenir en el segundo día del Debate sobre el estado de la región en la Asamblea de Madrid ha sido el número dos de UPyD, Ramón Marcos, que se ha visto obligado a hacerse cargo del discurso preparado para Luis de Velasco, que no ha podido comparecer al encontrarse enfermo.
Marcos, mucho mejor en la réplica, ha hecho un discurso ponderado, constructivo y en el que, sin dejar de criticar la gestión de Aguirre en muchos puntos, también ha encontrado áreas en las que ambos han estado de acuerdo.
Menos administración
El de UPyD ha empezado por comparar al PP y al PSOE en su forma de eludir los verdaderos problemas de nuestro país y ha pedido a Aguirre que, en la medida de sus posibilidades, emprenda los cambios necesarios.
Así, ha pedido que se recorte más la administración regional: "Necesitamos que Madrid deje de ser un miniestado", ha dicho, defendiendo que para ello "hay que acabar con el Consejo Consultivo, el Consejo Económico y Social o la Agencia de Protección de Datos".
También ha pedido que se recorte aun más el número de consejerías y que se reduzca la "administración paralela", ya que todavía quedan "198 entes públicos" de los que "sólo han reducido 15 y mantienen aquellos en los que hay más personal".
Marcos ha criticado también algunos puntos concretos como la gestión de Caja Madrid, crítica que ha hecho extensiva a "todos los partidos que estaban presentes en el consejo". Otro aspecto que ha recibido las críticas es el famoso tupper en los colegios, que ha citado como parte de los recortes "que no se han hecho adecuadamente".
"Hay que replanteárselo todo"
Aguirre ha agradecido el discurso de Marco e incluso le ha felicitado por el poco tiempo que ha tenido para plantearlo. Además, ha vuelto a aprovechar la ocasión para hacer afirmaciones ideológicas de calado, como cuando ha afirmado que ha sido "el intervencionismo y las interferencias en los mercados" lo que "ha puesto el mundo al borde del colapso", además de asegurar que "Keynes está más que superado" y que lo que es una "mercancía averiada" es "el keynesianismo, el intervencionismo y su corolario el socialismo".
Del mismo modo, la presidenta de la Comunidad de Madrid se ha mostrado convencida de que es necesario un gran cambio institucional en España: "Estoy totalmente de acuerdo en que habría que replanteárselo todo", ha asegurado, recordando como dijo en la primera jornada del debate que tras 33 años de sistema autonómico ni el País Vasco ni Cataluña "se sienten integrados" en el Estado, ha dicho recordando al respecto la masiva manifestación de este martes en Barcelona.
Por último también ha pedido al de UPyD que presente propuestas concretas sobre "cómo evaluar a los funcionarios, qué paradas de metro o qué hospitales cerrar o a cuáles de los 40.000 interinos de la Comunidad hay que despedir".