El nacionalismo en pleno y su habitual muleta de los ‘comunes’ vuelven a olvidar cualquier compromiso institucional y, al contrario, usan otra vez las instituciones para hacer política cortoplacista y propiciar el enfrentamiento social, sin importarles el posible coste económico de su actitud.
La victima será de nuevo el Mobile World Congress, el importantísimo evento de las telecomunicaciones que verá, cuando la inestabilidad del procés ya ha despertado dudas sobre su continuidad en Barcelona, cómo sus actos protocolarios son tomados como rehén de reivindicaciones políticas.
Colau, marcando el camino
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, fue la primera en anunciar que no asistirá a la recepción oficial del Mobile World Congress que se celebra este domingo por la noche presidida por el Rey. Será su forma de significarse a favor del separatismo y la república catalana, por la libertad de los golpistas en prisión provisional y en contra de la monarquía. Un gesto muy medido de la alcaldesa de cara a las galerías nacionalista y antisistema que se difunde horas después del mitin en el Colegio de Abogados de Barcelona del presidente del Parlament en un acto presidido por el ministro de Justicia, Rafael Català.
La soflama de Torrent provocó que el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, Jesús María Barrientos, el presidente de la Audiencia de Barcelona, Antonio Recio, el fiscal superior de Cataluña, Francisco Bañeres, y la fiscal provincial de Barcelona, Concha Talón, entre otros, abandonaran la sala mientras la decana Eugènia Gay trataba en vano de que Torrent dejara de hablar de "presos políticos".
También el Parlament y la Generalidad
No es pues extraño que, tras contactos entre Colau y Torrent, el presidente del Parlament haya comunicado que tampoco acudirá a la recepción del Rey, en una protesta que en su caso hará extensiva a la inauguración institucional del MWC, a la que tampoco irá.
"El presidente es absolutamente consciente de su papel institucional, que siempre ejerce con todas las consecuencias. Sin embargo, el jefe de Estado no ha dedicado ni una sola palabra al millar de heridos del 1 de octubre por la actuación de la Guardia Civil y la Policía Nacional", han señalado fuentes cercanas a Torrent que dicta Efe. El de ERC sí que acudirá mañana a la cena oficial junto al Rey.
Además, la posición de Colau y Torrent ha sido secundada por la Generalidad. Ninguno de los tres representantes de la administración catalana previstos acudirá ni a la recepción ni a la cena: después de que el secretario de Telecomunicaciones del Govern, Jordi Puigneró, anunciase que no acudiría a la inauguración del MWC por la presencia del Rey, los otros dos máximos representantes de la consejería de Empresa y Conocimiento, Pau Villòria y Joan Aregio, han declinado asimismo su participación.
"Irresponsable"
Colau, sí asistirá a la cena posterior a la recepción oficial para mostrar, sostienen fuentes municipales, el apoyo institucional de la ciudad a la celebración del Mobile World Congress. El dirigente del PP en Barcelona Alberto Fernández ha cargado contra la alcaldesa, a la que ha tildado de "irresponsable" y "mejor aliada de los enemigos de Barcelona". También han criticado su decisión el delegado del Gobierno, Enric Millo, y el propio Xavier Albiol.
Asimismo, fuentes del Ministerio de Energía han destacado que "Barcelona se juega mucho estos días" y que "todos los ojos estarán puestos en el MWC, de cuyo éxito dependerá la permanencia en Barcelona de la mayor feria de tecnología móvil del mundo, algo en lo que debemos estar todos unidos", recordando que el impacto económico de la feria el año pasado "se ha cifrado en 465 millones de euros".
Pero esas cifras no parecen importar a un nacionalismo quiere aprovechar la dimensión internacional del salón de la telefonía móvil para incidir en la internacionalización del proceso y denunciar la supuesta falta de democracia en España.
Cacerolas, pitos y lacitos
Puede que sea la última vez que el Mobile World Congress se les presenta como plataforma propagandística de la república y quieren exprimir la ocasión. Está previsto recibir a los congresistas con folletos sobre la "falta de libertades en Cataluña" y una explicación sobre el uso de un lazo amarillo por parte de un sector de la ciudadanía poniendo como ejemplo a Guardiola.
La Assemblea Nacional Catalana (ANC) pide a los partidarios de la república catalana que aporreen cacerolas y hagan sonar los pitos de los coches a partir de las nueve de la noche, hora prevista para la recepción con el Rey. "Los catalanes no tenemos rey", proclama la organización al lado de un retrato de Felipe VI al que se le ha añadido una porra.
La amenaza de los CDR
Los Comités de Defensa de la República (CDR) preparan acciones y llaman a rodear el Palau. Vuelve el ambiente de movilización en las organizaciones separatistas. La combinación entre el certamen y la visita del Rey espolea a los activistas.
Los organizadores del Mobile mostraron sus dudas sobre la permanencia en Barcelona durante el golpe separatista de los pasados septiembre y octubre. La actividad hotelera para el certamen no es la misma que en anteriores ediciones, con bajadas de tarifas y reservas de última hora.
Convocatoria de signo contrario
Esta tensión institucional añade más incertidumbre e impacta de pleno en la confianza económica en Cataluña bajo la amenaza de que el separatismo vuelva a tomar las calles.
De signo totalmente contrario es la convocatoria que está empezando a circular por las redes sociales y en la que se anima a la ciudadanía a recibir al Rey con banderas españolas y catalanas el domingo por la tarde en las plazas de España y de Cataluña en Barcelona.