Todo el mundo tiene un pasado y el de Elsa Artadi es tan brillante como contradictorio. Becada en Harvard, profesora en Italia y máster del universo por la Generalidad. El Gobierno dice que fue una alumna muy aplicada en materia de 155, circunstancia que combinó con la dirección de campaña de Carles Puigdemont. Practicante del yoga, el running y el dibujo a lapicero, la economista es la mujer de moda, el nombre a seguir, el poder de Puigdemont en la sombra y el centro de todas las miradas.
El rastreo de su pasado arroja algunas anécdotas deslumbrantes, como que en su primera boda, con un sobrino de Xavier Trias, pasó de ir al banquete alegando una indisposición. También se ha escrito sobre su estrecha relación académica con el economista de las chaquetas de colores, Xavier Sala-Martín o que fue Andreu Mas-Colell quien la introdujo en los vericuetos de la Generalidad.
Cambio de nombre
Mujer de porte atlético, Elsa Artadi fue también una forofa del Espanyol de Barcelona en los tiempos en que jugaba en el estadio de la carretera de Sarriá y aún no había catalanizado su nombre. Según desvela el diario digital La contra deportiva, una joven Elsa Vila Artadi (posteriormente alteró el orden de los apellidos) frecuentaba el fondo sur del recinto blanquiazul, donde se citaba la juventud más entusiasta del club perico.
Según el citado medio, "sus tendencias políticas en aquella época juvenil estaban muy alejadas de las tesis separatistas". También apunta que "a la Elsa del Gol Sur la recuerdan los viejos del lugar como una chica simpática y muy educada. Explican que en realidad no era muy futbolera, pero que le gustaba el ambiente de la grada".