El Ministerio del Interior llevaba tiempo organizando el posible despliegue que las Fuerzas de Seguridad del Estado tenían que llevar a cabo en Cataluña en el caso de que la Generalidad siguiese adelante con su plan de llevar a cabo el referéndum ilegal del próximo 1 de octubre. Elaborado por la Secretaría de Estado de Seguridad, las cifras del despliegue son uno de los secretos mejor guardados por el departamento que dirige Juan Ignacio Zoido.
En la elaboración de la planificación se ha tenido en cuenta la posibilidad de que los agentes de los Mossos d'Esquadra, que tienen mandos políticos designados por su cercanía ideológica a los altos cargos de la Generalidad, no cumplan escrupulosamente con los mandatos judiciales que les llegan y mantengan una calculada actitud de pasividad que impida que la actuación policial tenga la eficacia que debería tener.
Desde principios de este mes de septiembre, efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil han ido trasladándose hasta Cataluña para unirse al despliegue de ambos cuerpos en la región. El último gran movimiento está teniendo lugar desde mediados de esta semana y finalizará, según las previsiones del plan elaborado por el Ministerio del Interior, entre el lunes y el martes de la próxima semana.
Fuentes de las Fuerzas de Seguridad consultadas por Libertad Digital sitúan el número de efectivos estatales extra que habrán llegado para esas fechas a la región en 7.000 efectivos. De ellos, unos 3.000 pertenecerán a la Policía y otros 4.000 a la Guardia Civil. Se unirán de ese modo a los 6.000 agentes de ambos cuerpos que están de forma fija en Cataluña, ampliando el número de efectivos estatales totales a 13.000, cifra cercana a los casi 17.000 Mossos d´Esquadra.
El grueso de ese componente extra, unos 4.000 efectivos, estará conformado por agentes que forman parte de unidades que son conocidas habitualmente como antidisturbios. Se trata de las Unidades de Intervención Policial (UIP) de la Policía y de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil. A ellos, les acompañarán agentes de los servicios de información, policía judicial, seguridad ciudadana, unidades de prevención… o personal de apoyo.
Este mismo viernes, Interiorha cumplido con la parte administrativa y ha comunicado al consejero catalán de Interior, Joaquim Forn, que el Gobierno ha decidido desplazar unidades de refuerzo de Policía y Guardia Civil en virtud del artículo 38.2 de la Ley Orgánica 2/1986 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y que las funciones que desempeñarán serán de "vigilancia del espacio público y mantenimiento del orden", además de actuar "en caso de que se mantuviera el referéndum ilegal".
En la misma carta, según fuentes de Interior, se especifica que "estas unidades actuarán en apoyo de los Mossos d´Esquadra, que tiene encomendadas estas funciones. Todo ello al objeto de dar cumplimiento a la instrucción 2/2017 de la Fiscalía Superior de Cataluña, remitida el pasado 8 de septiembre a la Guardia Civil, Policía Nacional y Mossos d´Esquadra ordenando activar las actuaciones necesarias para impedir la celebración del referéndum ilegal".