El Mundo denuncia que "el independentismo radicaliza el acoso a los alcaldes de la ley" "siguiendo el consejo de Puigdemont". Rosell dice en su editorial que la política catalana ha entrado "en fase de batasunización. Los carteles de acoso a los alcaldes leales a la ley, confeccionados y distribuidos por los radicales de Arran evocan los métodos siniestros de los años de plomo en Euskadi, cuando el señalamiento de los delatores era el relámpago que precedía a la detonación de los pistoleros". El sueño de la CUP, ser comparados con ETA, dales una pistola y verás lo que son capaces de hacer. Pero como las pistolas no son fáciles de conseguir, menos mal, "los alcaldes señalados en dichos carteles padecerán las consecuencias en forma de escraches, cercos y cotidianas increpaciones". No quiero ni pensar en lo que van a sufrir sus hijos en los colegios. Para colmo, el responsable es el jefe del ejecutivo catalán. "Fue el propio Carles Puigdemont quien realizó un llamamiento expreso a los independentistas para que ejercieran presión sobre aquellos alcaldes que se negaran a participar en el referéndum ilegal". El lado bueno es que si sucede alguna desgracia el culpable tiene nombre y apellido. Y cargo. En cuanto a la última payasada que se ha sacado de la manga Pablo Iglesias para salir en la tele, dice que "se trata de la enésima añagaza mediática de Podemos para atraerse al PSOE y quebrar su apoyo hasta ahora leal al Gobierno". Arcadi Espada les arrea un par de tortazos a los del manifiesto anti-PP. "Se ha dado a conocer un manifiesto contra el referéndum, que se reserva el derecho de admisión". Y es que esta gente "intachable" mezcla "franquistas, terroristas, terroristas de Estado, machistas, racistas, corruptos y Rajoy. Es extraño, sin embargo, que en su preclaro currículum tan autodistinguidas personas no destaquen el rasgo de autoridad más común que comparten, que es el de haber hecho durante muchos años una eficacísima contribución a la tarea de legitimar moral y políticamente el nacionalismo". Zas en toda la boca. Raúl del Pozo se ha dedicado a preguntar por aquí y por allá. Un separatista le ha dicho que "va a haber follon" y la soplado que el plan es utilizar como escudos humanos ante la Guardia Civil a "viejos en sillas de ruedas y madres dando el pecho a sus hijos". Qué listos, oye. ¿Preguntarán a los ancianitos y mamis elegidos si les parece bien la idea o los pondrán por las bravas, como acostumbran? "Lo que no tengo claro es si va a haber declaración de independencia o no", le ha confesado a Del Pozo. ¡Hombre, no fastidies! Si esa es la traca de la fiesta, a ver si nos van a dejar sin el espectáculo final de Puigdemont proclamando la república catalana en el balcón de la Generalidad. También ha preguntado el columnista a una socialista. "Estoy muy asustada. Esto va a terminar mal". "Pueden enloquecer. Son capaces de proclamar la república aunque ésta dure, como siempre, 10 horas o una semana". Uf, qué alivio, ya me temía que nos aguarán la fiesta y nos dejarán sin foto de portada.
El País se emperra en que "el PSOE deja de oponerse a la aplicación del artículo 155" haciendo caso omiso a los desmentidos del propio Pedro Sánchez. Lluis Orriols, otro de los superlistos de El País, dice que hay que apoquinar para mantener en Cataluña dentro de España. "Lo que se ofreciera a Cataluña sería inevitablemente a costa de otras comunidades autónomas. Es por este motivo que cabe preguntarse hasta qué punto estarían dispuestos los ciudadanos de otras comunidades autónomas a asumir los costes de un nuevo encaje de Cataluña en el Estado". Pues mira, listillo, ya te digo yo que hasta ningún punto. Ni un duro. "Si no se percibe la pérdida de Cataluña como un riesgo real, entonces probablemente los españoles no están en condiciones de aceptar pagar un precio para resolver la cuestión catalana". Hay que convencer "a la opinión pública" de que "la unidad de España requiere inevitablemente asumir ciertos costes". Qué manera tan fina de plantear un chantaje. Una, que es un poco más tosca –madrileña, al fin y al cabo– lo expresaría así: 'He secuestrado a su hijo, si no paga le pego un tiro'. ¿Será el tal Orriols el encargado del intercambio? Lo mismo se lleva el 3%. Jorge M. Reverte ve que "la sociedad catalana está rota". Ojo clínico, se llama. "Las consecuencias de haber optado por el no al referéndum ya se conocerán, pero se presenta oscuro el panorama para esos catalanes". Pobres, podemos dar asilo a los que se han pringado desde el principio, los melindres y pusilánimes que se busquen la vida. "En Cataluña tienen que pasar dos cosas cuanto antes, que no se celebre el 1-O y que se convoquen elecciones autonómicas". Vale, a ver si esta vez los que no quieren separarse se abstienen de largarse a la playa y van a votar. Joaquín Coll azuza abiertamente a Rajoy para que aplique ya el 155 "para preservar el interés general. El 155 arrebataría la competencia electoral al presidente de la Generalitat con el objetivo de que sea el gobierno español el que convoque lo antes posible nuevas elecciones en Cataluña". Pues sí que están asustados, sí, suplicando ahora por el 155.
ABC dice que "la Cataluña independiente no podría pagar las pensiones". Eso ya se ha dicho hasta la saciedad y no ha colado, Bieito. Hermann Tertsch dice que lo que se está viviendo "era evitable de haberse combatido en sus comienzos hace ya casi un lustro". "Sólo décadas de educación en el odio permitidos por todos los gobiernos de España y un lustro de dejadez, pasividad y desidia del gobierno de Rajoy ante los planes evidentemente criminales de la Generalidad explica la situación (…) Ahora las decisiones son inaplazables. Dada la situación que puede derivar en tragedia, urge que el gobierno asuma la responsabilidad de la defensa de las libertades pisoteadas y la neutralización de la alianza golpista. Después habrá de iniciarse la inevitable tarea, dura y larga, de la reconciliación". Francamente, Hermann, lo veo difícil, no lo verán tus ojos. Ignacio Camacho echa un jarro de agua fría a los optimistas con Rajoy. "Rajoy no pasará a la Historia como el presidente al que se le independizó Cataluña", pero "no convocará elecciones" y del 155 "ya veremos". ¿Ya veremos cuándo? Porque quedan 15 días.
La Razón dice que no, que "Rajoy no prevé activar el 155 antes del 1-O". A Marhuenda, como siempre, lo que haga Rajoy le parece de rechupete. "La respuesta del ejecutivo está siendo impecable" aunque "ya nadie se atreve a descartar la aplicación del 155". Salvo Rajoy, por lo que se ve. El almirante Ángel Tafalla lleva la contraria a Marhuenda. "¿A qué espera el Gobierno de todos para restablecer la legalidad para todos? El articulo 155 parece claramente redactado con una situación en mente análoga a la actual de Cataluña", leñe. Es más, para que quede claro que es tan demócrata como cualquiera y "los separatistas son numerosos" y "han hecho del referéndum su caballo de batalla con machaconas acusaciones de que no se les deja votar" propone acabar "de una vez permitiéndoselo, pero eso sí, junto al resto de los españoles". Sí, sí, vamos a votar, vamos todos a votar.
La Vanguardia sólo habla de la pela. "Hacienda pide al Govern la lista de nóminas para pagarlas". "El ministerio ultima con los bancos el cierre de la caja de la Generalitat". "Los altos cargos deben justificar los gastos de las tarjetas de crédito". La fanática Pilar Rahola flipa y dice que "cuando todo esto acabe no sólo pasará a la historia por los atropellos a la democracia que está perpetrando la derecha española, sino también por el servilismo cómplice de determinada izquierda patriótica". Lo dicho, le falta un tornillo. Ah, de los carteles señalando alcaldes no dice nada en toda la columna.