Albert Rivera ha vuelto a expresar este jueves su "apoyo sin fisuras" al Gobierno ante el desafío secesionista tras reunirse por segunda vez en tres días con Mariano Rajoy en La Moncloa. El líder de Ciudadanos ha abogado por una foto de la unidad con el propio Rajoy y Pedro Sánchez, aunque ha insinuado que el líder del PSOE no está por la labor: "En estos momentos, con la que está cayendo, una foto de los tres sería muy necesaria y muy buena, pregunten a los que no quieren", ha señalado.
El líder de Cs ha añadido que en esa instantánea sería positivo sumar también a Pablo Iglesias, aunque no ha dudado en arremeter contra la "equidistancia" mostrada en las últimas horas por el líder de Podemos, en particular por la comparación realizada entre Carme Forcadell y la presidenta del Congreso, Ana Pastor, de quien ha dicho que puede equivocarse pero que, a diferencia de su homóloga en Cataluña, "no ha dado ningún golpe a la democracia".
Rivera, midiendo mucho sus palabras, se ha mostrado convencido de que, a diferencia de lo ocurrido el 9 de noviembre de 2014, esta vez sí se evitará la consulta ilegal prevista para el uno de octubre: "El 9-N la Fiscalía no movió ficha. ¿Los motivos? Pregúntenle al señor Torres Dulce, que dimitió" ha asegurado en referencia al entonces Fiscal General del Estado.
Apremio al TC
El presidente de Ciudadanos no ha dudado en apremiar al Tribunal Constitucional para que suspenda la ley de referéndum y los decretos firmados el miércoles para la consulta del 1-O "con la máxima celeridad posible". "Seguro que están trabajando duro", ha asegurado, recordando que "toda España está pendiente" de su decisión.