Tras cuarenta y ocho horas de dudas sobre la postura de los socialistas frente al Acuerdo Económico y de Comercio entre la Unión Europea y Canadá, conocido comoCETA,este jueves el secretario general, anunció que se abstendrán en la votación del próximo jueves en el Congreso de los Diputados.
De este modo, los socialistas no ratificaran el CETA. Así se lo trasladó el líder del PSOE, Pedro Sánchez, al Comisario Europeo de asuntos económicos, Pierre Moscovici, con quien mantuvo un encuentro de trabajo en Madrid. Se trató de una reunión "amable" y "positiva", según señaló Moscovici en las redes sociales.
Sánchez le comunicó al Comisario Europeo los distintos argumentos por los que los socialistas optaran por la abstención. Entre otras cosas los socialistas critican que "en 1.600 páginas del Tratado, sólo hay 4 sobre nuestros derechos medioambientales". Además señalan que existe "desequilibrio en la protección de los derechos laborales frente a los inversores y en la ausencia de penalizaciones en la violación al Tratado".
Según un comunicado emitido por el PSOE, Sánchez le trasladó Moscovici que el PSOE es una "fuerza política multilateralista, partidaria de una apertura comercial internacional, firmes defensores de una relación estrecha con Canadá". No obstante se muestra contrario a "cerrar las fronteras, como quiere el Partido Popular, o el proteccionismo al que se abraza Unidos Podemos". Según Sánchez, la solución pasa por "contar con la sociedad civil" y propone hacer "los Tratados de abajo a arriba".
La abstención del PSOE contrasta con la que han mantenido los socialistas europeos que en las votaciones en Parlamento Comunicado han defendido el CETA.