El director de El Diario, Ignacio Escolar, censuró una entrevista al cineasta francés Cyrille Martin, por su documental ¿Un nuevo Dreyfus?, sosteniendo que éste sostenía "una teoría de la conspiración" y señalando que la comparación de Jamal Zougam, el único condenado en España como colocador de las bombas del 11-M, "con el caso Dreyfus… es una estupidez".
El texto lo firmaba el periodista Gonzalo Gómez Montoro, miembro de Izquierda Unida-Francia y activista de la Marea Granate. La entrevista se llegó a publicar en El Diario, pero fue inmediatamente censurada. Tras ello, Escolar publicó una nota en la que señalaba que "Martin sostiene una teoría de la conspiración en su trabajo bajo el disfraz de resaltar los errores que se cometieron en la investigación policial y judicial", suscribiendo, seguía la nota, "las teorías que han difundido durante varios años periodistas como Pedro J. Ramírez y Federico Jiménez Losantos".
Días después, Luis del Pino, injuriado por Escolar, contestó al censor con un artículo en Libertad Digital donde le hacía varias preguntas relacionadas con el 11-M:
Si la bomba de Vallecas tenía metralla, ¿por qué no había metralla en los cadáveres de las 192 víctimas mortales de 11-M?
Si el 11-M fue un atentado islamista, ¿por qué no se procesó a los dueños de esa casa donde se montaron las bombas, que sí tenían relación con Al Qaeda?
Como era de esperar, esas preguntas nunca obtuvieron respuesta.