No hay entrevista o declaración pública en la que Pablo Iglesias no aproveche para atizar verbalmente a Iñigo Errejón. El secretario general morado se encuentra en plena campaña interna por el liderazgo del partido en la Comunidad de Madrid, en la que se enfrentan, entre otros, el candidato 'pablista', Ramón Espinar, y la 'errejonista', Rita Maestre. Este proceso es determinante para que se vean cómo están los equilibrios de fuerzas dentro de la formación.
Así las cosas, Iglesias ha intentado este martes en una entrevista en Antena 3 dejar en evidencia los postulados de Íñigo Errejón asegurando que para sus militantes tiene que ser "difícil" elegir "el camino" marcado por el número dos del partido cuando ven que "casi todos los medios adversarios de Podemos" muestran sus preferencias por él. Por ello, le ha dicho que no le beneficia nada que los "adversarios" digan que le prefieren a él o le elogien, porque eso "le coloca en una posición de enorme debilidad" a la hora de defender ante los militantes.
"Creo que a Íñigo (Errejón) le perjudica mucho ese marco, que todos los medios enemigos, que son adversarios de Podemos, digan que prefieren a Errejón", ha asegurado. "Cuando es el adversario quien te señala, pues es muy difícil que la gente que esté en Podemos diga éste es el camino", ha insistido.
Golpes más sutiles
Pero el de los medios de comunicación no ha sido el único ataque a Errejón en esta entrevista. El líder de Podemos ha insistido en que su número dos tiene un tono "más templado" que el suyo, que es "más vehemente", pero que eso no quiere decir que sea "menos agresivo" ni que tenga "más razón". "A veces los templados son más eficaces dando golpes que los vehementes", ha asegurado.
Preguntado directamente por si los "golpes" de Errejón, más sutiles, hacen más daño que los suyos ha asegurado que "efectivamente, y eso forma parte del estilo de discutir", ha afirmado.
Y ha dado a entender que su relación personal se ha deteriorado bastante: "Una relación con un compañero de trabajo no es igual que la discusión con un amigo. La del amigo es más fácil que termine con una caña, pero la del trabajo a veces no tanto porque la discusión tiene que ver con la organización del trabajo que afecta a mucha gente".
"Pero creo que eso es una cosa positiva. Es verdad que eso te somete a que te digan que te estás peleando, pero aquí puedes elegir dos cosas. O la de los partidos tradicionales, que es la de los 'off the records', o hacer lo que hacemos nosotros que es discutir abiertamente y a veces pues nos rozamos en Twitter. Es verdad que los medios se nos echan encima pero creo que este país tiene que acostumbrarse a discutir de política", ha añadido.