Los españoles podrían verse obligados a votar en plena Navidad, exactamente, el 25 de diciembre. Eso es lo que ocurrirá posiblemente si después de que Mariano Rajoy haya fijado la fecha del inicio de la investidura para el martes 30 de agosto, el actual presidente del Gobierno en funciones no consigue ser investido y el desacuerdo entre los políticos obliga a los españoles a pasar por las urnas una tercera vez en algo más de 12 meses.
La primera votación tendría lugar el miércoles 31 de agosto y la segunda, con toda probabilidad, sería el viernes 2 de septiembre. El panorama se complica por la agenda política de Rajoy: los días 4 y 5 debe participar en la cumbre del G20 en China y tendría que partir el día 3. La cita es ineludible y no habría tiempo para la jura o promesa del presidente y sus ministros, por lo que viajaría a esta cumbre todavía con un Gobierno en funciones.
En este marco, los españoles se verían obligados a acudir a una nueva cita electoral en plenas vacaciones de Navidad. Sólo lo evitaría que, en caso de no ser investido, Mariano Rajoy aceptase ir a una segunda votación de investidura, pero ya posterior a las elecciones vascas y gallegas (25 de septiembre), lo que podría facilitar un acuerdo con el PNV que facilite la investidura de Rajoy como presidente del Gobierno.