La presidenta de Navarra, Uxue Barkos, ha defendido los cambios aprobados para la entrega del Premio Príncipe de Viana y ha afirmado que escuchar la Marcha Real en el homenaje a los reyes navarros era una "suerte de chirrido histórico".
Barkos ha hecho esta afirmación en un desayuno informativo en Madrid al ser preguntada por la decisión del Gobierno navarro de no invitar a los Reyes a la entrega del galardón, como era habitual desde su creación, y de desligar el acto del homenaje a los reyes navarros, que pasará a ser una "fiesta popular".
"Para muchos navarros e historiadores asistir al homenaje a los reyes de Navarra en la capilla de Leyre bajo los sones de la Marcha Real, era una suerte de chirrido histórico que a nadie, le aseguro, terminaba de contentarle", ha contestado la jefa del Ejecutiva.
Ha recalcado que nadie ha pretendido hacer del Premio Príncipe de Viana una "chistorrada popular", sino desvincularlo de la Corona española, con la que "nunca tuvo vinculación", y darle su propio protagonismo a través de un acto "institucional y riguroso" en el Palacio de Olite. Junto a ello, ha precisado, se mantiene el homenaje a los reyes de navarros en la Abadía de Leyre.
La presidenta navarra ha asegurado la voluntad del Gobierno navarro de mantener una relación "completamente normalizada e institucional" con la Jefatura del Estado "en todos aquellos encuentros que deban producirse".
"No se pretende comparar la Monarquía con una chistorrada, nunca se ha hecho una afirmación de esas características", ha subrayado y ha insistido en que lo que se ha pretendido ha sido celebrar el premio de forma "mucho más ordenada".