De forma repentina y a última hora de este domingo, Podemos envió un comunicado en el que daba a conocer que dos de los fichajes estrella de Pablo Iglesias para las generales, el constitucionalista Javier Pérez Royo y el exnegociador de José Luis Rodríguez Zapatero con ETA, José Manuel Gómez Benítez, decidían plantar al partido morado y no formar parte de las listas de Podemos al Congreso de los Diputados para el próximo 20 de diciembre.
"Ambos han tomado esta decisión por motivos personales y cada uno de ellos de forma independiente", aseguran desde Podemos, y no dan más detalles de su marcha. Eso sí, aclaran que, pese a esta decisión "de no querer participar en las listas electorales, ambos han manifestado su voluntad de querer seguir colaborando con la formación contribuyendo dentro de sus ámbitos de especialidad y en su compromiso con el cambio político en España".
Pérez Royo
Menos de una semana ha durado Pérez Royo como número tres de Podemos al Congreso de los Diputados por Sevilla. El catedrático de Derecho Constitucional fue elegido a dedo por Pablo Iglesias, ya que no pasó por las primarias de la formación. Su fichaje se conoció el pasado lunes y el líder de Podemos se felicitaba días después por ello.
Tras saltar la noticia, Pérez Royo recibió numerosas críticas por su marcha a Podemos. La mayoría de ellas llegaron de compañeros suyos durante la época en la que estuvo estrechamente ligado al PSOE como asesor de Manuel Chaves y Felipe González.
Gómez Benítez
En cambio, José Manuel Gómez Benítez, exnegociador de Zapatero con ETA, sí que se presentó a las primarias de Podemos en el equipo de Pablo Iglesias, fue el decimoquinto más votado, lo que le aseguraba una buena plaza por Valencia.
Pero el pacto de Podemos con Compromís cerrado hace unos días para ir juntos a las generales, y el posterior reparto de puestos en las listas entre ambas formaciones, relegó al jurista a un puesto secundario.
Ahora, ambos deciden dejar de ser candidatos a un mes de las elecciones generales del 20 de diciembre, un duro golpe para Pablo Iglesias que ve cómo ha perdido dos de los fichajes que presentó como estrella para las generales.