El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes la apertura de los primeros contratos para el futuro ciclo inversor en nuevos Programas Especiales de Armamento (PEAs) para las Fuerzas Armadas. Se trata de las futuras fragatas F110 de la Armada, para las que se designa una partida presupuestaria de más de 135 millones de euros, y para los blindados 8x8 del Ejército de Tierra, para los que se destinan casi 90 millones de euros.
Las razones para impulsar en primer lugar estos dos programas se basan en dos criterios. Por un lado, las prioridades marcadas por el alto mando militar en función de las necesidades a futuro existentes. Por el otro, porque supondrán un fuerte desarrollo para la industria de Defensa española, lo que aumentará la capacidad exportadora. Este hecho ya fue adelantado por el secretario de Estado de Defensa, Pedro Argüelles, en octubre de 2014.
Las fragatas F110, que están llamadas a sustituir a las actuales fragatas F80 de la clase Santa María, tienen un diseño innovador en el que ya lleva trabajando desde hace unos años la empresa pública naval Navantia a petición de la Armada. El Gobierno autoriza ahora a celebrar un contrato de servicios I+D+i para realiza tres programas de estudios tecnológicos que desarrollarán la integración de sensores en el mástil, la incorporación de nuevas capacidades en el sistema de combate SCOMBA de buques de la Armada, y el desarrollo de un sistema de actuación y control de misiles para ser instalados en las futuras fragatas.
Los prototipos y desarrollo se probarán en el mástil integrado y formarán parte de los sistemas que se instalen en las fragatas F-110 de la serie. Además, se pretende desarrollar el Sistema de Combate de los buques de la Armada (SCOMBA). Se trata de un sistema unificado con el que desde el año 2002 se equipa a la mayor parte de los buques de la Armada y que fue desarrollado a partir del sistema de combate Aegis estadounidense, basado en la conexión entre el radar de detección temprana de posibles alertas y el armamento de los buques.
El Ministerio de Industria anticipará la cantidad mencionada en seis anualidades repartidas entre 2015, 2016, 2017, 2018, 2019 y 2020, por importes de 20.862.164, 37.275.284, 29.276.987, 25.952.272, 14.368.761 y 7.578.896 euros, respectivamente. La financiación se encuadra dentro de los PEAs de manera que el Ministerio de Industria correrá con los gastos de pre-financiación y el Ministerio de Defensa devolverá las cantidades anticipadas de una sola vez en el ejercicio 2021.
El programa del blindado 8x8 ha sido ya abortado en varias ocasiones debido a la crisis económica. El Gobierno Zapatero llegó a hacer un concurso público para la selección de posibles candidatos, pero fue paralizado. Con Carmen Chacón al frente del Ministerio de Defensa, el Consejo de Ministros llegó a solicitar un crédito extraordinario para comprar las primeras 300 unidades, pero nunca se llegó a hacer efectivo.
El objeto de este contrato de servicios I+D+i es la realización de seis programas de estudios tecnológicos que desarrollarán los prototipos del futuro vehículo. La futura entrada en servicio del VCR 8x8 permitirá, en el corto-medio plazo, dotar a los actuales batallones de Infantería de las Brigadas Orgánicas Polivalentes BOP-Ruedas y, en el medio-largo plazo, dar de baja a los actuales BMR y algunos vehículos de cadenas, como el TOA M-113. También permitirá la sustitución progresiva de los VEC y BMR de los Grupos de Reconocimiento de Caballería, y de los Vehículos de Combate de Zapadores (VCZ) de los Batallones de Zapadores.
Al igual que en el caso de las fragatas F110, será el Ministerio de Industria y Energía en que anticipará la cantidad mencionada (casi 90 millones de euros) en tres anualidades repartidas entre 2015, 2016 y 2017, por importes de 40.801.200, 30.637.200 y 17.859.600 euros, respectivamente. El Ministerio de Defensa devolverá las cantidades anticipadas de una sola vez en el ejercicio 2018.