La cúpula de Podemos al completo llegó a las siete de la tarde a Madrid Río, escenario elegido por el partido para celebrar su último mitin de campaña.
Pablo Iglesias aparecía a esa hora escoltado por su número dos, Iñigo Errejón, y también, por su ya número tres, Carolina Bescansa. Acompañados además por una decena de miembros de la Ejecutiva morada, subían al escenario y saludaban. Tras ello, comenzaron los discursos.
Era el turno de Iñigo Errejón: "A partir del 24 nadie, por mucho dinero que tenga, estará en las instituciones", decía el número dos de partido, cuando, de repente, comenzó a escucharse un gran revuelo entre el público. Era Juan Carlos Monedero puño en alto apareciendo entre los asistentes. En el escenario, la cara de Errejón denotaba sorpresa.
El exdirigente del partido morado apareció y le robó todo el protagonismo al que hace unos días se refería como un "general mediocre" de Podemos.
Monedero llegó hasta a subirse al escenario. Tras darle un frío abrazo a Errejón, se hizo con el micrófono. "Pido que me regaléis una cosa, que el domingo yo pueda cantarle a alguien Volare", dijo en referencia a Esperanza Aguirre.
Tras la ovación del público, Monedero se bajó del escenario donde dejó a un perplejo Errejón. Las caras de los demás miembros de Podemos eran de completa sorpresa. El número dos del partido retomó el discurso como pudo, sin ningún tipo de referencia a lo ocurrido.