El último pleno del Ayuntamiento de Hospitalet de Llobregat, la segunda ciudad más poblada de Cataluña, con 260.000 habitantes, ha decidido denunciar a la Fiscalía al organizador de las procesiones de Semana Santa en el barrio de Sanfeliu, el párroco Custodio Ballester. El delito que se atribuye al mosén es el de haber invitado a desfilar por segundo año consecutivo a la Hermandad de caballeros legionarios.
A instancias de Iniciativa per Catalunya (IC), CiU y el grupo socialista de la alcaldesa Núria Marín aprobaron una moción en la que se insta a investigar si se incumplieron las leyes y normas relativas "a la presencia de armas y uniformes en las manifestaciones". El texto también muestra su "repulsa" por "las actitudes del sacerdote Custodio Ballester que contribuyen reiteradamente a la crispación" y traslada al Arzobispado de Barcelona "nuestro deseo de que en el barrio de Sanfeliu se rehaga el espíritu de colaboración y concordia por el bien común".
El promotor de la moción, el concejal de IC, Lluís Esteve, resumía y traducía en un tuit el sentido de la frase: "Hoy, Hospitalet ha aprobado una moción para que jamás vuelva a desfilar la hermandad legionaria y que se vaya el capellán ultraderechista del barrio de Sanfeliu".
La procesión de Semana Santa del barrio de Sanfeliu es una de la que registra mayor asistencia de cuantas se celebran en Cataluña. El cura Ballester, por su parte, es conocido por no comulgar con las tesis nacionalistas. La moción municipal advierte al final que de todo eso se va a dar parte al "Departamento d'Interior" de la Generalidad y "al resto de las parroquias de la ciudad".