Esperanza Aguirre va por libre. Si la dirección nacional aboga por vincular a Ciudadanos con el PSOE e intenta buscar "manchas" a sus candidatos, la candidata popular no dudó en elogiar al partido del Albert Rivera hasta el punto de declarar que le gustaría "muchísimo" que estuviera “dentro del PP” y “todos volviéramos a converger”. “Así estaríamos unidos todos los que no nos sentimos de izquierdas”, argumentó en Onda Cero.
La líder del PP de Madrid y candidata a la alcaldía ya fue por su cuenta cuando en Génova ni tan siquiera se mencionaba a Podemos y ella llamó a dar la batalla ideológica el verano del año pasado. Ahora, de nuevo opta por seguir un discurso muy diferente al de la cúpula, que ha ordenado investigar a los candidatos que Ciudadanos va a presentar en los comicios de mayo. "Decir que un señor Albert de Barcelona no puede venir a Andalucía es intolerable" porque "España es una nación", censuró a micrófono abierto.
Una estrategia la de Aguirre compartida por Cristina Cifuentes, que también ha dicho públicamente que es "amiga" de Rivera y ve puntos coincidentes entre ambas formaciones, aunque defendió que se pueden criticar sus “lagunas”.
Preguntado sobre las declaraciones de Aguirre, Pablo Casado recalcó en esRadio que él "nunca" ha criticado al líder de Ciudadanos, pero que ve justificado que se le pregunte “qué es lo que son” y qué proponen para las locales. Y remató: "El hiperliderazgo de Rivera puede tener las consecuencias perversas que ha tenido UPyD".