El caso del ático de Estepona persigue al presidente de la Comunidad de Madrid. Ignacio González este lunes se ha encontrado con una nueva portada del diario El Mundo sobre esta cuestión. Se trata de una grabación de una conversación que él mismo mantuvo con dos comisarios, entre ellos José Manuel Villarejo, en noviembre de 2011 en una cafetería cercana a la la sede del gobierno regional.
Para el presidente madrileño, estas informaciones "son una evidencia de amedrantamiento" y "una demostración más de prácticas policiales que para nada se ajustan a la legalidad". Ha defendido que fueron los propios policías los que solicitaron esa reunión, con intención de grabarla y ha asegurado que a él ese café siempre le sonó "extraño".
"Lo que pretendía el señor Villarejo era que yo le facilitará unos recibos del pago del alquiler de mi casa para justificar una investigación policial que fue declarada ilegal", ha asegurado el presidente regional este lunes tras un acto en el Museo del Prado.
González ha reiterado que nunca ha llamado a este comisario. Por último, ha puesto el foco en el hecho de que en estos tres años de investigación el comisario Villarejo no haya revelado "estas conversaciones" .