Ana Iríbar, viuda de Gregorio Ordóñez, ha recordado en Es Noticia la importancia de Gregorio en la política vasca cuando se cumplen 20 años de su asesinato a manos de ETA. "Era un tipo normal que creció en una familia trabajadora y que un día entendió que había que hacer algo porque había un problema muy gordo en el País Vasco, el terrorismo".
Ha recordado "su gran espíritu de servicio hacia los demás" lo que "le empujó mucho a querer trabajar desde un ayuntamiento". Gregorio "tenía la necesidad de dar respuesta a un problema, de romper con tanto silencio, con tanto prejuicio como había en San Sebastián en aquellos años 80".
Ana también ha explicado lo duro que ha sido para su hijo Javier que tenía "un año y un mes cuando asesinaron a su padre". Javier "ha preguntado mucho y yo le he ido explicando y contando desde muy pequeño quién era su padre, lo fiel y honesto a sus principios que era".
Sobre la situación actual con Bildu gobernando en San Sebastián y teniendo representación en el parlamento nacional, Ana Iríbar ha asegurado que Gregorio "sentiría vergüenza de ver lo que está haciendo su propio partido y sentiría repugnancia al comprobar que el proyecto político de ETA sigue vigente y está ocupando un espacio público importante".