Según la La ley 53/1984 de Incompatibilidades del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas el personal investigador contratado por la universidad tiene prohibido compatibilizar su actividad con trabajos remunerados. Es decir que Íñigo Errejón, con un contrato de investigador como el que mantenía con la UMA (40 horas semanales y 1.800 euros brutos al mes) "no puede dedicarse a otra actividad y cobrar por ello" decían fuentes de la propia universidad malagueña al diario El Mundo.
Es más, el propio contrato que firmó Errejón -después de que su amigo Alberto Montero se lo preparara a medida- recogía que "tiene conocimiento de las obligaciones que se derivan de la normativa de incompatibilidades establecida en la Ley 53/1984, de 26 de diciembre y disposiciones complementarias", la cual, en su capítulo IV, artículo 12, establece que no se pueden ejercer "actividades privadas, incluidas las de carácter profesional, sea por cuenta propia o bajo la dependencia o al servicio de entidades o particulares".
Además, Errejón tampoco cumplió lo que contempla uno de los artículos de esa normativa, concretamente el 14, que establece que, de querer compatibilizar su actividad becada con otra, tiene que solicitar el reconocimiento previo de compatibilidad. La realidad es que Errejón compatibilizó su supuesta actividad investigadora con la dirección de la campaña electoral para las europeas de Podemos (de la que cobró 2.688 euros) así como el asesoramiento político del partido de forma posterior (otros 2.688 euros entre junio y julio), según documentos del 7 de mayo y del 25 de julio.
Por otro lado, El Mundo recoge otros pagos "por servicios profesionales" con fecha 2 de abril de 2014 por 900 euros y el día 3 del mismo mes 1.200 euros. En total 7.476 euros de Podemos entre abril y julio. Un periodo en el que era el becado de Alberto Moreno para investigar políticas de vivienda en Andalucía 40 horas semanales en un despacho de la Universidad de Málaga. Si a esa cantidad le sumamos los 1.800 euros brutos de la beca, Errejón salió a más de 4.000 euros al mes en ese periodo de tiempo.