"El PP ha hecho todo lo que podía hacer". La frase de María Dolores de Cospedal tras la reunión de la cúpula en Génova ha generado numerosas críticas, de entre las que destacan unas: las que le dedica El País, que la convierte en protagonista de la portada y le dedica un editorial lleno de dardos.
Bajo el titular "El PP no cree necesario hacer nada más contra la corrupción", el artículo carga las tintas contra "la cúpula" del partido que controla la número dos de Rajoy. Y critica la comparecencia de la secretaria general, de quien dice que "reaccionó a la defensiva" ante los que piden una renovación que "incluya incluso un cambio generacional". Una afirmación que llega en medio de las maniobras de Soraya Sáenz de Santamaría, íntima de Juan Luis Cebrián y benefactora de Prisa, protagonista desde hace años de una soterrada lucha interna con Cospedal.
Desde que la mediación de Soraya Sáenz de Santamaría con los acreedores, 28 bancos y 17 fondos de inversión, evitó la quiebra del Grupo Prisa --que tiene una deuda gigantesca de miles de millones de euros-- El País no disimula su apoyo incondicional a la vicepresidenta, que parece marcar la línea editorial del diario. Con episodios tan bochornosos como la presentación en Barcelona de Elpais.cat con el dúo Soraya-Cebrián como maestros de ceremonias.
El diario habla en el artículo de "bloqueo" y señala el "tono airado" empleado por Cospedal en su respuesta ante las críticas internas. Su reacción, apunta, evidenció la "tensión" que se vive dentro del PP. Y concluye señalando que su comparecencia no sirvió para defender a Rajoy frente a la cascada de escándalos de corrupción de las últimas semanas: "Rajoy no quiere comparecer en el Congreso con el argumento de que es el PP, y no el Gobierno, quien debe explicar los escándalos que le afectan, pero Cospedal no aclaró nada sobre los 1,7 millones pagados en B para las obras de la sede central de la calle Génova, o la investigación sobre la posible financiación ilegal de su propia campaña electoral".
En el editorial continúan las críticas. El diario pide "medidas ejemplares" y ataca, en alusión a la número dos del PP, a los "responsables políticos que durante años han sostenido que sus conmilitones son víctimas de oscuros ataques cuando se hurga en la razón de decisiones discrecionales o en sus patrimonios, o que pretenden aplazarlo todo hasta que haya sentencias judiciales".
Añade que los partidos sí pueden hacer cosas, como "conducir indagaciones internas o aceptar comisiones de investigación parlamentaria". Y apunta que tachar de "cobardes", como hizo Cospedal, a los críticos que piden "la renovación de la dirección del PP o un congreso para dar paso a una nueva generación" sitúa "el problema en términos de mantenimiento del poder, y no de regeneración".