La concentración que tuvo lugar este domingo en la Plaza de Cataluña de Barcelona y que reunió a todos aquellos catalanes que quisieron celebrar que también se sienten españoles en el Día de la Hispanidad, ha sido portada este lunes en el diario La Vanguardia. Sólo se ha llevado la imagen de portada con un pequeño pie de foto que dice: "Concentración en la plaza de Catalunya. Según cifró el Ayuntamiento, 38.000 personas fueron a la cita de Societat Civil".
El problema es que la fotografía que ha empleado el diario del Grupo Godó para su portada no pertenece al acto de este domingo en Barcelona, sino a su edición anterior en 2013. La fotografía, donde se aprecia un buen número de gente, pertenece al acto del pasado año. Así lo ha reconocido el diario a través de su red social Twitter, pidiendo disculpas a sus lectores.
Por un error en la edición gráfica, 'La Vanguardia' publica hoy una foto del 12-O que corresponde al 2013. Pedimos disculpas a los lectores.
— LaVanguardia.com (@LaVanguardia) octubre 13, 2014
Ya en páginas interiores, La Vanguardia dice que "el acto tomó un cariz político, y no una reclamación social como pretendía la organización". Del acto también destacan las declaraciones de Albert Rivera: "Deseo independizarme del PP, del PSOE, de la corrupción, del paro y de todos aquellos que piden la secesión"; de Toni Cantó: "Mas está robando el derechoa a decidir del resto de España y está atacando la calidad de vida de los catalanes y los españoles"; de Sánchez Camacho: "El principal rival de Mas es él mismo, ya que ha perdido el sentido común y la responsabilidad"; y de Josep Ramón Bosch: "Que esta división llegue a su final y que las diferentes propuestas vuelvan a discutirse en el marco de la convivencia".
Curiosamente, esta información lleva un apoyo titulado: "Los ultras queman esteladas y amenazan con volver el 9-N". Así, cuentan cómo un grupo de "organizaciones ultras como España en Marcha, Democracia Nacional y Falange exhibieron banderas preconstitucionales y abundante simbología fascista y franquista" y terminaron quemando varias banderas independentistas al grito de "que arda la estelada".
Otro de los apuntes que hace La Vanguardia es que, pese a tener más asistentes que los del año pasado, "Sociedad Civil Catalana no consiguió llenar toda la plaza".