Un pequeño grupo de agentes de los Mossos d'Esquadra -vinculados con el movimiento independentista radical Estat Català- imparte adiestramiento en tácticas militares de asalto y guerrilla a algunos miembros de la Policía autonómica. Según informa Fernando Lázaro en El Mundo, el grupo cuenta con dos instructores británicos que habrían participado en la guerra de Kosovo.
Fuentes consultadas por el diario de Unidad Editorial han detectado al menos a dos de los integrantes de este grupo policial, que están realizando gestiones para adquirir un arma ajena a la dotación de la Policía autonómica. Se trata del rifle de asalto SA-VZ 58, un arma que emplea el cartucho 7,62 por 39, diseñado y fabricado en la República Checa.
Según estas fuentes, estos integrantes de las unidades de élite de los Mossos utilizarían este nuevo armamento para realizar prácticas con los afines al rupturismo. Además, la instrucción militar estaría realizándose en instalaciones perfectamente acondicionadas y dedicadas a la práctica de actividades recreativas paramilitares de Air Soft, todo ello camuflado en una asociación dedicada a actividades de este tipo.