El presidente de la Generalidad, Artur Mas, ha asegurado que el proceso separatista no ha tenido por ahora repercusiones en el ámbito económico, aunque ha advertido al empresariado catalán que "la libertad tiene un precio".
"Los que quieren libertad han de saber que la libertad tiene un precio y que no tenerla también, y quizás más alto", ha dicho Mas en un almuerzo organizado por la Cámara de Comercio de Barcelona, al que han asistido unos 250 empresarios.
Mas ha manifestado que la inseguridad jurídica puede llegar a tener un mayor impacto económico que procesos políticos como el que está protagonizando el Gobierno de Cataluña, decidido a convocar una consulta separatista el próximo 9 de noviembre, pese a la negativa del Ejecutivo central.
Mas ha afirmado que "hasta ahora" este proceso no ha interferido en la actividad económica y empresarial, pero ha reconocido que puede llegar a repercutir: "Pensar que un proceso de estas características se hace de rositas no es posible", ha dicho.
Artur Mas ha comentado que este mes de septiembre el Gobierno catalán estará "muy pendiente" del referéndum de independencia de Escocia, que será un "precedente muy importante" para Cataluña.
Si gana el sí, ha explicado, "no habrá ni un solo miembro de la Unión Europea que discuta el resultado del referéndum y las instituciones europeas "no tardarán muchos días" en enfocar la negociación para ver cómo encaja el proceso escocés en la propia dinámica de la UE.
El caso Pujol no afecta "políticamente"
Además, Artur Mas ha asegurado que el caso Jordi Pujol no afectará "políticamente" al Gobierno catalán y ha criticado a los grupos de la oposición por pedir una comisión de investigación en el Parlamento autonómico cuando el expresidente ha accedido a comparecer.
"Cada uno tiene sus sentimientos pero, políticamente, a mí no me afectará y al gobierno de Cataluña les aseguro que tampoco", ha aseverado Mas, tras lo cual se han oído algunos aplausos entre los más de 200 asistentes al almuerzo. El presidente de la Generalidad ha admitido, sin embargo, que en la vertiente personal sí que se siente "triste".
Mas ha cuestionado que sea "serio" que los partidos de la oposición, entre ellos ERC, pidan una comisión de investigación en el Parlamento autonómico para investigar el fraude fiscal que habría perpetrado Jordi Pujol, después de que el expresidente ya accediera a comparecer en la Cámara catalana, a condición de hacerlo a partir del 22 de septiembre.
En este sentido, Mas ha remarcado que los grupos no pidieron una comisión de investigación cuando la diputada y presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, rechazó acudir al Parlament cuando se la citó a comparecer por el caso de Método 3.
"¿Han visto algún partido que haya montado una comisión de investigación por negarse a ir al Parlament?", ha añadido en alusión a Sánchez-Camacho. "Pujol -ha proseguido Mas- no tiene la obligación legal de comparecer, pero ya dice que lo hará por escrito y, al día siguiente, piden una comisión de investigación. Si quieren una comisión de investigación, que la hagan" pero "que investiguen todo", ha remachado con semblante serio.