El expresidente de la Generalidad, Jordi Pujol, comunicó el pasado miércoles a la Agencia Tributaria que no tenía nada que declarar al ser requerido para que informara sobre sus bienes en el exterior, según informa La Vanguardia.
Pujol no acudió personalmente a la Agencia Tributaria de Barcelona y fue su representante fiscal el que se encargó de contestar a la petición de información de Hacienda. El expresidente catalán defiende que él no ha sido ni fue titular de cuenta alguna en el exterior. Así pues, la inspectora de Hacienda encargada del trámite de preguntarle si mantenía alguna cuenta fuera de nuestras fronteras con patrimonios ocultos que aún no hubiera revelado -pese a su confesión pública y las declaraciones complementarias de su esposa y sus hijos-, no obtuvo más que una respuesta negativa muy escueta.
En cualquier caso, en Hacienda han acogido con estupefacción la declaración del expresidente de CiU y la consideran una prueba de su negativa a explicar lo sucedido y en especial el origen del dinero oculto.
Este martes, Cristóbal Montoro intervendrá en el Congreso sobre el asunto. La oposición preguntará si Jordi Pujol se acogió a la amnistía fiscal promovida por el ministro de Hacienda.