Sucedió en octubre de 2010. La portavoz de UPyD, Rosa Díez, acudió a la Facultad de Ciencias Políticas de la Complutense para dar una conferencia pero, al llegar, se encontró con decenas de estudiantes que le boicotearon. Gritos, abucheos, tarjetas rojas y la lectura de un manifiesto en el que la calificaron de "victimista", "de buscar fingir mareos ante los pilotos rojos de la televisión" u "oportunista". El broche final fue decirle que "no es bienvenida y nos gustaría que no viniese nunca más", así como gritos de "fuera fascistas de la universidad".
Al frente de esta rebelión estudiantil se encontraba un profesor de la Facultad. Su nombre es ahora de sobra conocido: Pablo Iglesias. Tal y como se puede ver en el vídeo, el líder de Podemos da la orden de comenzar el acoso al acercarse a la primera chica que se levanta y a la que el resto siguen. Incluso no duda en hacer gestos para indicar a los alumnos cómo situarse. Otra de las personas que participa en el escrache, blandiendo una cartulina roja, es el director de campaña de Podemos, Iñigo Errejón. Al final, el líder de Podemos se sitúa incluso en primera fila.
Este jueves, esRadio le preguntaba por su participación y, pese a las evidencias gráficas, Pablo Iglesias aseguraba que "es radicalmente falso que ninguna persona de Podemos participase en un escrache". "No se produjo ningún escrache, se produjo un acto público de la representante de un partido, en la que algunos profesores acudimos para ver qué decía la representante de ese partido. En ese acto, algunos estudiantes mostraron una tarjeta roja e invitaron, con un micrófono, a tener un debate con esa persona. Debate que después se produjo. Lo que usted dice es absolutamente falso", remató Iglesias, quien insistió en que no hubo "ningún escrache".
Iglesias, la estrella del momento, dio estas explicaciones en una rueda de prensa celebrada este jueves en la que propuso la organización de una "gran asamblea ciudadana" para que decida cómo se organizará su partido. Eminentemente asamblearia, la formación que se destapó como la gran protagonista de las elecciones europeas quiere distinguirse del resto de formaciones, a las que llama "casta", desde el origen mismo la formación. Así, en lugar de organizar un congreso para decidir la estructura organizativa y la dirección del partido, lo hará, dice, mediante una "asamblea constituyente". "Vamos a trabajar para que la asamblea constituyente de otoño sea el inicio de un nuevo tipo de organización y de otra forma de hacer política".
De momento, él mismo se reserva el derecho de nombrar a las 25 personas encargadas de organizar dicha asamblea para el próximo otoño. En cualquier caso, ha dejado claro que este equipo será sometido a "decisión popular" con una votación similar a las primarias abiertas que hicieron para la candidatura europeas.
Dicha elección tendrá lugar entre los días 12 y 13 de junio. Los resultados se conocerán el día 14. La asamblea, que se ha convocado bajo el nombre de "Sí, podemos", tendrá lugar en la Universidad Complutense de Madrid.
Pablo Iglesias insiste en que "absolutamente todo" está por decidir dentro de la organización de Podemos e insiste en que siguen llegando adhesiones al partido, además de apoyos económicos.
Tras lanzar sus mensajes habituales contra "la casta política" que "nos ha conducido al desastre", también ha reconocido que de momento contemplan alcanzar acuerdos programáticos con Izquierda Unida aunque lo deja sujeto a las decisiones que tome la organización del partido una vez sea escogida.
A favor del referéndum
Sobre el referéndum ilegal que pretende realizar el Gobierno catalán, el líder de Podemos ha dicho que "yo soy español y me encantaría construir un país con catalanes y vascos, pero no soy nadie para decidirlo". "Si me pregunta usted si me gustaría que se independizara el País Vasco o Cataluña, no. Me gustaría que se quedaran con nosotros".