Apenas dos días después de que el rey Juan Carlos anunciara su abdicación, internet estallaba en un sinfín de bromas hacia el heredero, que ya cuenta incluso con una parodia de carne y hueso.
Si algún día la Casa Real decide crear una página personal para potenciar la imagen del Rey Felipe VI, tendrá que optar por comprar un dominio menos evidente que www.felipesexto.es. Y es que, hasta el momento, esa web ya tiene dueño y contenido propio. Se trata de un contenedor de enlaces que llevan en su mayoría a páginas porno y de contactos. Lo mismo ocurre con el dominio .com y .net. Ninguno está disponible.