Tras semanas de silencio sobre un caso que afecta a su gobierno directamente, el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Diego Valderas, ha hecho unas breves declaraciones sobre las cuentas de UGT-A, un escándalo destapado por LD, y cuyo último capítulo es la fiesta pagada por dinero público revelada por El Mundo.
Preguntado por la petición del PP de que la Junta se persone en el presunto desvío de UGT de subvenciones de la administración andaluza,Valderas ha dicho en declaraciones a Efe que de momento sólo conoce las informaciones publicadas por los medios de comunicación, que incluyen, "con suficiente razonamiento y fundamentaciones, elementos que no tenían que haberse desarrollado".
Pese a admitir dichos "elementos", Valderas descarta una actuación del gobierno andaluz por el momento. "Hasta que no tenga una visión más amplia, no sé, llegado el caso, cuál es la actitud que tiene que tomar del Gobierno de la Junta" respecto a ese caso, ha incidido Valderas.
Sí ha actuado en este caso la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que esta semana ordenó a la Policía que investigue las informaciones sobre las cuentas de UGT sobre el presunto desvío de subvenciones y la elaboración de facturas falsas.
Presión a Alaya
En la entrevista, Valderas también se ha referido a la marcha de Griñán y al escándalo de los ERE, así como al apoyo que sigue ofreciendo al PSOE para gobernar en la región.
Valderas ha dicho que desde IU sostienen la "tolerancia cero" respecto a la corrupción "alcance a quien alcance" y que insisten en pedir "celeridad" en la Justicia para investigar los casos porque algunos se dilatan hasta diez años.
"La Justicia se torna más justa cuando es más rápida", ha afirmado el vicepresidente, en línea con otros dirigentes andaluces que piden a Alaya que deje ya el caso en manos del TSJA. En el caso de los ERE, ha añadido "de pasar página, nada, en todo caso las páginas sólo se pasan cuando se alcanzan los resultados finales" y se concluyen las responsabilidades de los implicados.
El vicepresidente andaluz ha admitido que sólo se le puede reprochar que le dijera a la juez Mercedes Alaya, que investiga los ERE, que instruyera con rapidez.