Los expresidentes de Ferrocarriles de la Generalidad de Cataluña (FGC) Enric Roig y Antoni Herce, condenados a cuatro años de prisión por malversación, disfrutan ya del régimen abierto, sólo están obligados a acudir prisión para pernoctar de lunes a jueves, después de que a finales de mayo pasado ingresaran en la cárcel de Quatre Camins para cumplir su condena.
Según han informado a Efe fuentes penitenciarias, la Dirección General de Servicios Penitenciarios de la Generalidad ha concedido hace unos días el tercer grado a ambos reclusos, al tener en cuenta que se trata de delincuentes primarios, sin reincidencia, con interés en afrontar el resarcimiento económicamente por el delito cometido y con un entorno social y familiar estable.
Herce y Roig ingresaron, respectivamente, los pasados días 21 y 22 de mayo en la cárcel Quatre Camins de La Roca del Vallès (Barcelona) para cumplir la condena de cuatro años de prisión que les impuso el Supremo, después de que el Gobierno les denegara el indulto que habían solicitado. Así pues, sólo han estado 48 días encarcelados en régimen cerrado, sin poder salir de prisión.
Tras permanecer unas semanas en el módulo de ingresos del centro penitenciario, la Junta de Tratamiento de Quatre Camins los calificó directamente en tercer grado, lo que les permite salir a la calle y acudir a prisión solo durante unas horas, normalmente a dormir. La Junta de Tratamiento formuló su propuesta de clasificación de los dos reclusos a la Dirección General de Servicios Penitenciarios, que ha confirmado el régimen abierto de los dos expresidentes de Ferrocarriles de la Generalidad.