Beiras se encara con Feijóo y golpea su escaño: "Me voy, no hay Dios que lo aguante"

El portavoz de Alternativa Galega de Esquerda, Xosé Manuel Beiras, ha abandonado  enrabietado unos minutos el hemiciclo del Parlamento gallego, tras protagonizar, nuevamente, una escena insólita y bochornosa en el Parlamento de Galicia.

El incidente se produjo durante la sesión de control, en el ya habitual numerito del desquiciado político nacionalista, con tres preguntas de la oposición sobre las fotos del jefe del Ejecutivo con el narcotraficante Marcial Dorado, cuando el presidente afeaba la estrategia del portavoz del BNG, Francisco Jorquera, de querer imitar a Xosé Manuel Beiras, portavoz de AGE.

Feijóo acusó al líder nacionalista de sobreactuar, con lo que, en su opinión, sólo le queda "sacar el zapato" -como hizo Beiras hace años en una ocasión en el Parlamento- o "emocionarse tanto, tanto" hasta llorar, como también hizo el portavoz de AGE en el pleno pasado, para "imitar tanto, tanto, tanto a quien quiere imitar".

En este momento, Beiras se levantó de su escaño y se dirigió enfurecido al de Núñez Feijóo, que estaba interviniendo, se encaró con él y como si fuera un matón dio un golpe en la madera y dijo: "Un poco de decencia". Luego volvió al escaño y señaló: "Me voy, no hay Dios que lo aguante", gritó y volvió a chillar "quién se cree usted que es, el juez supremo del país". Acto seguido, entre constantes llamadas al orden de la presidenta de la Cámara Pilar Rojo, Beiras se volvió a levantar y subió las escaleras que conducen a la salida, agitando los brazos y la cabeza, mientras refunfuñaba frases ininteligibles, y abandonó el hemiciclo, no sin antes golpear una de las paredes.

Xosé Manuel Beiras, minutos después, regresó al hemiciclo en una sesión convulsa, mientras intervenía la viceportavoz de su grupo, Yolanda Díaz.