El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, anunció este jueves que su departamento está llevando a cabo una concentración de depósitos de la droga decomisada, con el objetivo de que al final sólo haya en España una veintena de lugares destinados a este propósito, a los que se determinará un área geográfica de influencia y se les dotará de una mayor seguridad.
Durante su comparecencia ante la comisión de Interior del Congreso de los Diputados, en la que explicó la evolución del tráfico ilícito de drogas en España durante 2012, adelantó también que próximamente entrarán en servicios dos nuevos centros de destrucción de droga, en Madrid y la costa mediterránea.
Con estas dos nuevas aperturas, serán cinco los centros crematorios en los que se destruye la droga decomisada. En 2012 tan sólo había un centro de este tipo, situado en Asturias, y otros dos fueron puestos en marcha en los primeros meses de 2013 en localidades no desveladas en la región de Andalucía.
El ministro aseguró que el objetivo del Gobierno es que, a finales de este año, se haya terminado toda la droga que permanece almacenada en España. Se congratuló, asimismo, de haber conseguido reducir el precio de la quema de esta droga, que actualmente tiene un coste de 210 euros/kilogramo y que antes era de 560 euros/kilogramos.
Sobre los robos de drogas en los últimos años en depósitos de la Administración Pública, dijo que en las últimas horas se han recuperado 110 de los 120 kilos de cocaína que fueron robados en un depósito en el puerto de Málaga en 2011, en una operación policial en la que se ha detenido a seis personas.
Además, también dijo que se han recuperado "gran parte" de los mil kilos robados en un edificio de la Agencia Tributaria en Málaga la pasada Nochevieja, en una operación en la que hubo doce detenidos en dos fases diferentes.