Beatriz Rodríguez Salmones ha sido la última víctima de la campaña de acoso a los domicilios de políticos del PP. Salmones ha dicho en una entrevista en esRadio con Dieter Brandau que "no me he planteado denunciar, si hay que hacerlo se hace, lo consultaré" ya que "me parece una cuestión secundaria".
Según Salmones, "es tan evidente que la actuación de la Policía ha sido muy correcta y conocen la cuestión, a veces denuncias para ponerlo en conocimiento y no es el caso". La diputada del PP ha subrayado que "el punto de vista que de verdad importa es el de la gente que está ante el drama de un desahucio".
De esta forma, ha añadido, "ante todo y mucho más que los que se manifiestan en nuestras puertas, estamos trabajando con verdadera angustia para solucionar los problemas de esta gente que tienen este drama". La diputada popular ha dicho que "el verdadero núcleo de este tema es la solidaridad con ellos".
En cuanto a las palabras del ex secretario general de la antigua Alianza Popular, Jorge Verstrynge, sobre que a la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, "le viene bien" la violencia "para justificar el sueldo y el cargo", Salmones se ha limitado a decir en esRadio que "lo último que voy a entrar es en polémicas que me parecen de payasos".
La diputada del PP ha destacado que "las normas son las normas, esto es un Estado de Derecho y la delegada del Gobierno y las fuerzas del orden actúan con la máxima corrección y dentro de la ley". Las declaraciones de Verstrynge las ha calificado de "manifestaciones estrambóticas que no me merecen ningún respeto".
Sobre el acoso a los domicilios de los políticos del PP se ha limitado a decir que "en democracia no se pueden traspasar las líneas, no se puede invadir la vida privada de una familia". Sin embargo, ha insistido, "nuestra preocupación es escuchar y dar solución a los problemas de los desahucios, no la incomodidad de los que estamos sujetos a este tipo de acosos".