Un tenso José Antonio Griñán ha compadecido en la mañana de este lunes ante la prensa sevillana y ha dado explicaciones sobre el caso de los ERE que, tras las investigaciones de la jueza Alaya durante la pasada semana, han vuelto a poner en la picota al presidente de la Junta por su etapa como consejero de Hacienda en la administración andaluza.
En respuesta a la petición del líder popular andaluz, Juan Ignacio Zoido, Griñán se ha mostrado dispuesto a acudir "a las Cortes Generales" siempre, eso sí, que lo permita "el reglamento" de la cámara.
En cualquier caso, Griñán ha dicho que también ha pedido comparecer en "el próximo pleno que se celebre" en el parlamento andaluz, "para contrastar datos". He comparecido en una comisión de investigación y he respondido en 12 ocasiones en el pleno
De hecho, ha llegado a asegurar a los periodistas que "estaría encantado de que se celebrase una comisión de investigación conjunta" del Congreso y el parlamento andaluz "para investigar el caso Bárcenas y los ERE".
La responsabilidad política
Preguntado por si asumirá alguna responsabilidad política cuando su gobierno está en el punto de mira de la Justicia, Griñán lo ha descartado: "La responsabilidad política se tiene que asumir por los responsables, no vamos a buscar responsabilidades donde no las hay".
También ha contestado a su socio de gobierno, Diego Valderas, quitando hierro a sus declaraciones sobre una hipotética ruptura del pacto. Tras decir, en alusión a la prensa, que "no se pueden hacer titulares con respuestas a preguntas", ha afirmado que Valderas no hubiera dicho eso "espontáneamente" si no le hubieran preguntado. Él, ha añadido, hubiera "contestado lo mismo".
Sobre la corrupción
Después de un parte de su intervención en la que Griñán ha presumido de los "logros" de su gobierno –este lunes es el aniversario de las elecciones autonómicas- Griñán ha abordado lo que todos esperaban hablando genéricamente de "la corrupción" señalando que "es siempre condenable esté donde esté y afecta a quién afecte".
Sin embargo, rápidamente ha pasado a asegurar que "lo peor que podemos hacer es usar la lucha contra la corrupción para sacar créditos políticos", algo que "envilece el debate" y hace que se acabamos "recurriendo a la insidia y la calumnia".
Griñán ha denunciado lo que a su juicio son "mentiras, acusaciones veladas y disparates políticos y jurídicos" que ha lanzado la oposición y ha asegurado que entro en política con "los mismos medios de vida que tengo hoy".