ERC ha puesto este sábado otra prueba a Artur Mas. Si el presidente de la Generalidad quiere conseguir el apoyo parlamentario del partido independentista, tendrá que cargar, aún más, contra el Gobierno de Mariano Rajoy. Así lo ha puesto de manifiesto su líder, Oriol Junqueras, en su intervención ante el Consejo Nacional de la formación, en el que ha exigido que CiU explique "tantas veces como haga falta y tan bien como pueda" que la culpa de los recortes en Cataluña no se deben al despilfarro de los gobiernos regionales en los últimos años (entre ellos el tripartito del que formó parte), sino al supuesto expolio de Madrid.
De esta manera, el político nacionalista eludía responsabilidades, tanto de su formación como del actual Gobierno catalán, ante la precaria situación financiera de la Generalidad, uno de los gobiernos autonómicos que ha incumpludo el objetivo de déficit marcado por el Gobierno, lo que le obligará a realizar aún más ajustes.
Junqueras ha vinculado este sábado el apoyo de su partido a los presupuestos de la Generalidad a que el ejecutivo de Artur Mas culpe de los recortes en Cataluña al Gobierno de Mariano Rajoy. En su intervención ante el Consejo Nacional de ERC, no ha querido avanzar si su partido acabará apoyando o no los presupuestos que presente en el Parlamento catalán el gobierno de CiU, aunque ha advertido de que Cataluña se enfrentaría a unas elecciones anticipadas si no hubiese acuerdo.
En cualquier caso, Junqueras ha considerado "evidente" que "cualquier compromiso" por parte de ERC en materia presupuestaria irá "asociado de forma indefectible" a la exigencia al gobierno catalán de que explique "tantas veces como haga falta y tan bien como pueda" que los recortes que sufre Cataluña son culpa del Gobierno central.
Junqueras, que ha reconocido que los presupuestos serán "muy duros", ha recriminado al gobierno de Artur Mas que haya permitido de forma "inexplicable" que la percepción social sea que es el gobierno catalán el que determina la cantidad total de su presupuesto, ya que considera que no es verdad y además es "contraproducente" para obtener consensos sociales.
"Expolio económico"
En opinión del líder de ERC, el Gobierno central somete a Cataluña a un "expolio" económico, situación que además se ve agravada porque los impuestos de Cataluña se recogen en Madrid y la capacidad de endeudamiento de Cataluña se decide desde el Gobierno central. "Quien decide el tamaño, la cantidad y la extensión del presupuesto de Cataluña no es el gobierno de la Generalidad, porque no puede emitir billetes, ni cobrar impuestos ni endeudarse", ha señalado Junqueras, que ha insistido en que la cantidad de dinero que se fijará en los presupuestos de Cataluña la decidirá el ejecutivo de Mariano Rajoy.
Según el líder republicano, esta situación provocará unas "consecuencias terribles" para la sociedad catalana, ya que "faltarán muchos recursos para muchas cosas que son muy importantes". Por este motivo, considera "muy importante" que desde el gobierno catalán se explique que el "núcleo de la disposición presupuestaria" no corresponde a la Generalidad, sino al Gobierno central.
Según Junqueras, en Cataluña no sería necesario ningún recorte en el ámbito de la función pública si se dispusiera del presupuesto de tan sólo 15 días del Ministerio de Defensa -a razón de 47 millones de euros al día, según sus cálculos-.
Su objetivo político
Junqueras ha advertido de que si finalmente no hay acuerdo presupuestario, Cataluña se vería obligada a convocar elecciones anticipadas, lo que considera que sería bueno para su partido -ya que las encuestas les son favorables-, aunque sería "malo" para la comunidad. En este sentido, ha alardeado de que ERC es "el único partido del mundo" que no tiene como prioridad lograr el máximo número de diputados, sino conseguir su objetivo político, que en este caso es lograr la independencia para que Cataluña sea un país "próspero y justo". Por este motivo, se ha preguntado de qué le serviría a ERC sumar más diputados en unas elecciones anticipadas si luego no tuviera suficientes apoyos parlamentarios para tirar adelante el proceso soberanista. "No nos serviría de nada", ha exclamado.
En un hecho muy poco habitual, Junqueras ha ofrecido la mayor parte de su discurso de viva voz y fuera del atril dispuesto en el escenario, lo que ha dificultado la labor de los medios audiovisuales, que se han quedado sin poder grabar el sonido de buena parte de su intervención.