El consejero de la Presidencia de la Generalidad, Francesc Homs, ha afirmado que la voluntad del presidente catalán, Artur Mas, y del jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, es celebrar próximamente una reunión discreta de la que "no se tenga que dar cuenta", al menos no al concluir la misma.
"Es bueno que haya un espacio de relación entre los dos presidentes en el que se pueda hablar sin la presión que representa tener a los medios en la puerta", ha dicho Homs en una entrevista en TV3, en la que no ha concretado cuándo se celebraría esta reunión.
El consejero de la Presidencia, que tiene también a su cargo las relaciones exteriores de la Generalidad, ha denunciado también que el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación tiene la voluntad de "boicotear" cualquier intento de Cataluña de explicarse en el mundo, así que una parte de la "diplomacia catalana" también "se deberá hacer con discreción".
Las palabras de Homs causaron auténtica sorpresa en el Gobierno. Tanto que las calificaron de "opiniones" que no se deben de entender como "postura oficial de ningún tipo". Al menos, en lo que al presidente del Gobierno se refiere. "No hay noticia de ninguna reunión secreta", zanjó oficialmente un portavoz de Moncloa, informa Pablo Montesinos.
Mariano Rajoy, en Bruselas para participar en el Consejo Europeo en el que se debaten los presupuestos comunitarios, no hizo declaraciones a la entrada. Si bien, fuentes del Ejecutivo recalcaron a Libertad Digital que lo único que existe es la disposición del presidente a reunirse con Mas, "al igual como haría con cualquier responsable de una comunidad autónoma". Sobre dónde se celebraría el encuentro, recalcaron que "lo lógico sería en la Moncloa, en el formato habitual", si insistieron en que aún no "hay nada cerrado".