Tal día como hoy, 18 de octubre, pero de 2005, Libertad Digital llevaba en su portada lo más destacado de una entrevista al presidente del Gobierno realizada por una revista femenina de alta gama: "Zapatero alardea en Marie Claire de ser "rojo" y el "justiciero de las mujeres". Esta publicación le siguió durante su viaje a Estados Unidos con motivo del 60 aniversario de la ONU.
Durante el viaje se definió como rojo, "¡es que soy rojo!", dijo el presidente del Gobierno antes de asegurar que "nada me ha enseñado la derecha". Además de esto, el reportaje contaba que Zapatero dijo ser "feminista" y no perdió la ocasión de comentar una anécdota que le ocurrió en los pasillos de las Naciones Unidas cuando una mujer mexicana le dijo: "Usted es el justiciero de las mujeres". Para qué quería más este feminista declarado que ya había acoplado un Consejo de Ministros que contara con el mismo número de hombres que de mujeres.
No fue ésta la primera entrevista en la que José Luis Rodríguez Zapatero alardeaba de su defensa de los derechos de las mujeres. En mayo de 2004, apenas 20 días después de prometer su cargo de presidente del Gobierno ante el Rey, concedió una entrevista al periódico estadounidense The New York Times. Era su primera entrevista como jefe del Ejecutivo en un medio extranjero y no perdió la oportunidad de definirse como "feminista radical".
Iba tan lejos la defensa de Zapatero de este movimiento que en la revista Time llegó a afirmar que "no sólo es que sea antimachismo. Soy feminista. Una cosa que en verdad enciende mis venas son 20 siglos de un sexo dominando al otro... La igualdad sexual es más efectiva contra el terrorismo que la fuerza militar".
En marzo de 2007, aprovechando el Día Internacional de las Mujeres, Zapatero se declaró "con total convencimiento, feminista" y advirtió de que "hasta que los gobiernos no acepten que la paridad no es una opción sino una exigencia, no habrá igualdad". También se felicitó por la aprobación en el Senado de la Ley de Igualdad, un texto que, tal y como recordó, "tiene como seña de identidad" distintas medidas dirigidas a promover la paridad. Sentenció ZP que "el empeño de mi Gobierno responde a una certeza que me lleva a declararme con total convencimiento feminista".
Días más tarde, tras el debate de aprobación definitiva de la Ley de Igualdad, el jefe del Ejecutivo salió a la escalinata principal del Congreso de los Diputados donde le esperaban un grupo de diputadas socialistas y reconocidas feministas como Pilar Bardem, entre otras. Las mujeres, muchas de ellas con claveles rojos en las manos, aclamaron a Zapatero al grito de "¡ista, ista, ista, Zapatero, feminista!". Cada vez más entusiasmadas, cambiaron el lema de su consigna por una más amplia: "¡Ista, ista, ista, España, feminista!".