Después de que el departamento dirigido por Cristina Cifuentes haya decidido sancionar con 6.000 euros al particular que avisó de la protesta del 25-S, el colectivo anuncia nuevas movilizaciones que no contarán con los permisos oficiales.
Según ha explicado la coordinadora 25-S a Europa Press, la sanción les da "más razones que nunca" para no pedir permisos aunque recalcan que el convocante lo hizo "por iniciativa propia". "Da lo mismo pedirlo que no pedirlo. A la persona que legalizó las acciones del día 25 se le ha multado igual. Por ello no vemos la necesidad de comunicar", ha explicado. En su opinión, los próximos actos son acciones de "desobediencia civil pacífica" y no requieren, en su opinión, permiso alguno.
En concreto, el movimiento ha llamado el próximo día 23 a "rodear" de nuevo el Congreso y para el día 27, sábado, ha convocado una manifestación desde Plaza de España hasta Neptuno, a pocos metros de la Cámara Baja.