Según la periodista, el primer encuentro de Revilla con el Rey, "a quien admira profundamente pese a considerarse republicano" se produjo el 16 de julio de 2003 y llegó a la cita con más de media hora de adelanto, por lo que mató el tiempo invitando a un café al taxista.
"Cuando lo vi, lo saludé, ni bajé la cabeza ni nada. En lo que sí tuve que tener cuidado fue en tratarle de usted, porque, como él me trataba a mí de tú, se me escapaba a mí también el tuteo. Sigue siendo muy cariñoso conmigo". Por supuesto, le regaló unas anchoas seleccionadas especialmente para don Juan Carlos.
Sin embargo, revela el libro que hay algo que al Rey no le gusta de Revilla. "Una vez me dijo Zapatero: ¡Me cago en diez! Si tú le dijeras al Rey que eres monárquico, con lo que él te quiere, le harías feliz-. Sé que tiene una espina contigo, con eso de que no eres monárquico. Y es que Zapatero quiere un huevo al Rey", cuenta sin reparos.