Difícil será que pise más Torrente el puticlub alicantino D’Angelo Palace. Su dueño, Mario Garnero, exige a la productora de Santiago Segura, "Amiguetes Enterprise S.A.", el pago de 6.000 euros. Primero fue Cañita Brava con 6.000 pesetas de whisky; ahora, es Mario Garnero con 6.000 euros por grabar en un puticlub. Huele a futuro chiste.
"El local no queda identificado en la película, ni la fachada ni la puerta principal de la sala aparecen, como tampoco la piscina. No sale el logotipo del club y el personaje principal –Torrente- no cita en ninguna ocasión a nuestra sala", cuenta Garnero a EFE.
A la misma agencia, Garnero explica que la productora carecía de presupuesto, y que el acuerdo con la productora se basó "únicamente en publicidad".
Lleva razón Garnero: en la película no se nombra jamás a su puticlub. Por lo visto, según cuenta El Mundo, Torrente citaba la sala en las escenas que rodó junto a Juan Bonilla. Sin embargo, salvo que aparezcan en el DVD en la parte de "Escenas eliminadas", ni el logo, ni la fachada ni el nombre de la sala alicantina aparecerán en "Torrente IV".
De ahí que se descartara un principio de acuerdo de 6.000 euros por tres días de rodaje –la cantidad que Garnero reclama a Segura-.
"Torrente IV" se estrenó el 11 de marzo. En los tres días siguientes, recaudó 8,12 millones de euros según la consultoría Rentrak Spain.