LD (Europa Press) Los peores augurios se han confirmado. Las especulaciones en torno a la ausencia del rapero Chris Brown y su novia Rihanna en la gala de los Grammy del pasado domingo desató toda una serie de rumores sobre las posibles causas. Primero se conoció que el cantante pasó la noche en comisaría declarando por una presunta agresión, ahora se confirma que la agredida no es otra que su compañera sentimental, Rihanna, hospitalizada tras recibir una paliza por parte de Brown.
Sólo 90 minutos antes de que empezara la gala de los Grammy, en la que Chris Brown y Rihanna tenían previsto sendas actuaciones y estaban en la lista de lo nominados a un 'gong', la Policía hizo público un comunicado en el que informaba de la detención del rapero por una presunta agresión. De los hechos sólo trascendió que el cantante iba a enfrentarse a una multa de 50.000 dólares (38.280 euros) mientras que la identidad de la mujer se desconocía.
Sin embargo, poco después empezaron a desatarse los rumores en torno a la posibilidad de que fuera su novia Rihanna la agredida. Según testigos presenciales, la pareja ya pasó la gala previa a los Grammy insultándose y dirigiéndose improperios públicamente, lo que posiblemente derivó en la fuerte discusión que algunos pudieron observar en el interior del coche de Chris Brown en las horas previas a la ceremonia oficial.
Aunque la representante de la cantante, mundialmente conocida por su éxito Umbrella, aseguró que se encontraba en buen estado de salud, lo cierto es que Rihanna, de 20 años de edad, pasó la noche hospitalizada. Los agentes de la Policía de Los Ángeles la encontraron en el lugar de los hechos con contusiones en la cara, los brazos y las manos, magulladuras, marcas de mordiscos y la nariz sangrando.
La cantante, natural de Barbados, salió del hospital Cedars-Sinai en la noche del lunes, pero abandonó las instalaciones por la puerta trasera, para evitar a la nube de fotógrafos que esperaba en la entrada principal. De momento, el juicio por estos hechos se ha fijado para el próximo 5 de marzo, y Chris Brown ya ha sufrido las primeras consecuencias de esta pésima publicidad: la cancelación de uno de sus contratos publicitarios.
La marca de chicles Wrigley decidió anular el contrato con el rapero ante las graves acusaciones que pesan sobre él: " Wrigley está preocupada por las serias imputaciones hechas contra Chris Brown . Creemos que el señor Brown debe ser tratado en un proceso como cualquier otro ciudadano. En cualquier caso, hemos tomado la decisión de suspender su actual contrato de publicidad y las actividades de marketing relacionadas con el mismo".